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Jeremías 22:26 - Biblia Lenguaje Básico

26 A ti y a tu madre os enviaré a un país extranjero donde no habéis nacido y donde moriréis.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

26 Te haré llevar cautivo a ti y a tu madre que te dio a luz, a tierra ajena en que no nacisteis; y allá moriréis.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

26 Te expulsaré de esta tierra, a ti y a tu madre, y morirás en un país extranjero, no en tu tierra natal.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

26 y te echaré a ti y a tu madre, que te engendró, a otro país donde ustedes no nacieron, pero donde van a morir.

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La Biblia Textual 3a Edicion

26 Y te arrojaré a ti y a tu madre, la que te dio a luz, a un país extraño, donde no nacisteis, y allí moriréis;

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

26 Te expulsaré a ti y a la madre que te dio a luz a otro país en donde no habéis nacido, y allí moriréis.

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Jeremías 22:26
16 Referans Kwoze  

Jeconías comenzó a reinar a los dieciocho años. La capital de su reino fue Jerusalén, y su reinado duró tres meses. Su madre era de Jerusalén, se llamaba Nejustá, hija de Elnatán.


Jeconías llevaba ya treinta y siete años desterrado en Babilonia, cuando Evil Merodac, con motivo de su coronación como rey sacó de la cárcel a Jeconías.


Así que Jeconías dejó de vestir su ropa de prisionero, y el resto de su vida comió con el rey.


Además, mientras vivió, el rey de Babilonia se encargó de su mantenimiento diario.


Dios te quitará de tu puesto, y serás la vergüenza de tu jefe. Dios te agarrará con fuerza y, como si fueras una pelota, te arrojará a un país lejano. Allí morirás, y de nada te servirán tus famosos carros de guerra.


Decid al rey y también a la reina madre que bajen de su trono y se sienten en el suelo, pues ya no tienen derecho a lucir sus hermosas coronas.


Por eso no voy a tener compasión de ellos, sino que los echaré fuera de esta tierra; los llevaré a un país que ni ellos ni sus antepasados conocieron. Allí tendrán que adorar a otros dioses, día y noche.


Aunque suspiréis por volver a Israel, nunca jamás volveréis».


También traeré de vuelta a Jeconías, hijo de Joacín, que era rey de Judá, y a todos los habitantes de Judá que fueron llevados como esclavos a Babilonia. Yo soy el Dios de Israel, y os aseguro que voy a acabar con el poder del rey de Babilonia.


Jeremías escribió la carta después de que fueran llevados prisioneros a Babilonia el rey Jeconías, la reina madre, los funcionarios y la gente importante de Judá y Jerusalén, y también los artesanos y los herreros.


Ninguno de los que se fueron a Egipto quedará con vida ni volverá a Judá, aunque lo desee. Solo unos cuantos lograrán huir y volverán.


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