Jeremías 22:20 - Biblia Lenguaje Básico20 Así dice Dios a los habitantes de Jerusalén: ¡Id por todo el país; subid a las montañas más altas, y llorad desconsolados! Los países que debían ayudaros ya han sido destruidos. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 196020 Sube al Líbano y clama, y en Basán da tu voz, y grita hacia todas partes; porque todos tus enamorados son destruidos. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente20 Llora por tus aliados en el Líbano; grita por ellos en Basán. Búscalos en las regiones al oriente del río. Mira, todos han sido destruidos. No quedó nadie para ayudarte. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)20 Sube a los cerros del Líbano y grita; levanta tu voz desde los cerros de Basán y de lo alto del Abarim, porque todos tus amantes han sido aplastados. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion20 Sube al Líbano y clama, Eleva tu voz en Basán; Clama desde el Abarim,° Porque todos tus amantes han sido destruidos. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 197520 Sube al Líbano y grita, en el Basán alza tu voz, grita desde Abarín, pues todos tus amantes están aplastados. Gade chapit la |
Los que ahora vivís en palacios rodeados de finas maderas, ¡pronto sabréis lo que es sufrir! Cuando os llegue la desgracia, os retorceréis de dolor como mujer que está dando a luz. Seréis llevados a otro país donde seréis tratados como esclavos; allí os sentiréis confundidos y avergonzados por vuestra maldad. Y aquellos en quienes confiabais irán también al destierro.
voy a enviar contra vosotros a Nabucodonosor, rey de Babilonia, y a todos los pueblos del norte. Ese rey está a mi servicio, así que lo enviaré contra esta nación y sus habitantes, y contra los pueblos de alrededor. Voy a destruirlos por completo; voy a convertirlos en un montón de ruinas, en objeto de horror y de burla. Soy yo, Dios, quien lo asegura.
Supongamos que un hombre se divorcia, y que luego la que era su mujer se casa con otro hombre; ¿tú crees que el primer marido volvería a casarse con esa mujer? ¡Claro que no, pues sería como una tierra deshonrada! Entonces, ¿cómo es que quieres volver conmigo habiendo adorado a tantos dioses? Soy yo, Dios, quien lo asegura.
Dios dijo a Moisés: —Ni tú ni tu hermano Aarón reconocisteis mi santidad cuando el pueblo se quejó contra mí en el desierto de Sin y me exigió que les diera agua de Meribá de Cadés; al contrario, desobedecisteis mis mandatos y no disteis la cara por mí ante los israelitas. A pesar de ello, sube ahora al monte Abarín para que veas la tierra que voy a dar a los israelitas. Porque vas a morir sin disfrutar de ella, como ya le ha pasado a tu hermano Aarón.