Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Jeremías 20:11 - Biblia Lenguaje Básico

11-12 Pero tú, mi Dios, eres el Todopoderoso. Tú examinas al que es justo y sabes lo que pensamos y deseamos. Eres un guerrero invencible, y siempre estás a mi lado; por eso no podrán vencerme los que me persiguen; ¡quiero ver cómo los castigas, porque en ti confío! ¡Quiero ver cómo los derrotas y los cubres de vergüenza! Sufrirán un humillante fracaso que ya nadie podrá olvidar.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

11 Mas Jehová está conmigo como poderoso gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, y no prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás será olvidada.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

11 No obstante, el Señor está a mi lado como un gran guerrero; ante él mis perseguidores caerán. No pueden derrotarme. Fracasarán y serán totalmente humillados; nunca se olvidará su deshonra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

11 Pero Yavé está conmigo, él, mi poderoso defensor; los que me persiguen no me vencerán. Caerán ellos y tendrán la vergüenza de su fracaso, y su humillación no se olvidará jamás.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

11 Pero YHVH está conmigo como poderoso gigante. Mis perseguidores tropezarán y no prevalecerán contra mí. Sentirán la confusión de su fracaso, Su vergüenza eterna, que jamás será olvidada.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

11 Pero Yahveh está conmigo como guerrero potente, por eso mis perseguidores tropezarán y nada podrán; están totalmente avergonzados porque nada consiguen: ignominia eterna que no podrá olvidarse.

Gade chapit la Kopi




Jeremías 20:11
25 Referans Kwoze  

muchos me han atacado desde que yo era un muchacho, pero no han podido vencerme.


Deja totalmente avergonzados a todos los que se alegran de mi mal; cubre de vergüenza y deshonra a los que me desprecian.


Dios mío, ¡líbrame, por favor!, ¡ven pronto en mi ayuda!


¡Aplaudid con entusiasmo, pueblos todos del mundo! ¡Alabad a Dios con alegría!


¡Felices los que viven cerca de ti, los que viven en tu mismo Templo! ¡Nos saciaremos con lo mejor de tu casa, con las ofrendas que se hacen en tu Templo!


¡Venid a ver las maravillas que Dios ha realizado! ¡Venid a ver sus grandes hechos en favor de todos los seres humanos!


Por tanto, no tengáis miedo, pues yo soy vuestro Dios y estoy a vuestro lado. Mi mano victoriosa os dará fuerza y ayuda; mi mano victoriosa siempre os dará su apoyo.


Vosotros, israelitas, sois un pueblo débil y pequeño; pero no tengáis miedo, porque yo soy vuestro Dios, el Santo de Israel que os auxilia y os libera.


Todos los que fabrican ídolos se llenarán de vergüenza, quedarán humillados y en ridículo.


Yo te haré tan fuerte como una columna de hierro, como un portón de bronce, como una ciudad amurallada. Vas a enfrentarte a todas las autoridades, a todo el pueblo de Judá.


Esa gente luchará contra ti, pero no te podrá vencer, porque yo estaré a tu lado para cuidarte. Soy yo, Dios, quien lo asegura.


Jeremías respondió: Dios mío, tú lo sabes todo; tú bien sabes que, por ti, soporto que me insulten. ¡Acuérdate de mí, y ven a ayudarme! ¡No te quedes cruzado de brazos y castiga a los que me persiguen antes de que acaben conmigo!


Yo haré que seas para este pueblo como un fuerte muro de bronce. Los malvados pelearán contra ti, pero no te podrán vencer, porque yo estaré contigo para librarte de su poder. ¡Yo te salvaré de esos tiranos! Soy yo, Dios, quien lo asegura.


¡Avergüenza a mis enemigos, pero no me avergüences a mí! ¡Haz que tiemblen de miedo, pero a mí no me asustes! ¡Mándales tiempos difíciles, y destrúyelos de una vez!


Los que ahora vivís en palacios rodeados de finas maderas, ¡pronto sabréis lo que es sufrir! Cuando os llegue la desgracia, os retorceréis de dolor como mujer que está dando a luz. Seréis llevados a otro país donde seréis tratados como esclavos; allí os sentiréis confundidos y avergonzados por vuestra maldad. Y aquellos en quienes confiabais irán también al destierro.


De tal manera os humillaré y os avergonzaré, que nunca podréis olvidarlo».


Demuestras tu gran amor a miles de personas, pero también castigas a los hijos por el pecado de sus padres. ¡Tú eres grande y poderoso! ¡Por eso te llaman Dios del universo!


Ese día volverán a vivir muchos de los que ya han muerto: unos para vivir para siempre, otros para sufrir eternamente la vergüenza y el horror.


Solo nos queda decir que, si Dios está de nuestra parte, nadie podrá estar en contra de nosotros.


Pero el Señor Jesucristo sí me ayudó, y me dio valor para anunciar su mensaje a quienes no eran judíos. Así Dios me salvó de la muerte, como si me hubiera rescatado de la boca de un león.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite