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Jeremías 10:6 - Biblia Lenguaje Básico

6 Dios mío, tú eres muy poderoso, ¡no hay nadie tan grande como tú!

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Biblia Reina Valera 1960

6 No hay semejante a ti, oh Jehová; grande eres tú, y grande tu nombre en poderío.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

6 ¡Señor, no hay nadie como tú! Pues eres grande y tu nombre está lleno de poder.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

6 ¡No hay como tú, Yavé; tú eres grande, y grande es tu Nombre poderoso!'

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La Biblia Textual 3a Edicion

6 ¡Oh YHVH, no hay nadie como Tú! ¡Grande eres, y grande es tu Nombre en poder!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Nadie hay como tú, Yahveh; tú eres grande, y grande en potencia es tu nombre.

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Jeremías 10:6
27 Referans Kwoze  

¡Qué grande eres, Dios mío! ¡Todo lo que de ti sabemos es verdad! ¡No hay ningún otro Dios como tú,


Grande es Dios y digno de alabanza, más temible que todos los dioses.


Por eso, si oís la trompeta, acudid enseguida en nuestra ayuda. Nuestro Dios luchará por nosotros.


¡Dios nuestro, qué poderoso eres! ¡Todos tiemblan ante ti! Eres un Dios fiel a los pactos que siempre cumple sus promesas y nunca deja de amarnos. Mira cuánto han sufrido nuestros reyes y nuestros dirigentes, nuestros sacerdotes y profetas, y también nuestros antepasados. Desde el momento en que caímos bajo el poder de los reyes de Asiria hasta este mismo día, tu pueblo no ha dejado de sufrir.


¡Grande eres, Dios nuestro, y mereces nuestras alabanzas! ¡Tu grandeza es inmensa!


Grande es nuestro Dios, y grande es su poder; su sabiduría no tiene límites.


y diré con todas mis fuerzas: «¡No hay otro Dios como tú! Tú, Dios nuestro, libras a los pobres e indefensos del poder de quienes los maltratan».


Salmo compuesto por la familia de Coré.


Grande es Dios y digno de alabanza, más temible que todos los dioses.


Dios mío, ¡no hay otro Dios como tú! ¡Solo tú eres santo! ¡Solo tú eres poderoso! Tú has hecho grandes maravillas.


Los egipcios juntaron en montones las ranas muertas, y todo el país olía muy mal.


De lo contrario, esta vez enviaré todos mis castigos contra él, contra sus consejeros y contra todo su pueblo, porque no hay en toda la tierra otro Dios como yo, y se lo voy a demostrar.


Demos gritos de alegría, habitantes de Jerusalén, porque en medio de nosotros está el Dios único y perfecto, con toda su grandeza».


A Dios no podemos compararlo con nada ni con nadie. No puede ser representado con ninguna imagen. Los escultores fabrican estatuas, los joyeros las recubren de oro y les ponen cadenitas de plata. Los que no tienen dinero buscan un palo que no se pudra y se lo llevan a un artesano; pero este, por más hábil que sea, hace un ídolo que no se tiene en pie.


Nuestro Santo Dios afirma: «Con nadie me podéis comparar, nadie puede igualarse a mí».


¿Con quién podéis compararme? Yo no me parezco a nadie.


recordad todo lo que ha pasado desde tiempos antiguos. Yo soy Dios, y no hay otro; soy Dios, y no hay nadie igual a mí.


Pero nuestro Dios no es así; ¡él hizo todo lo que existe! Él fue quien eligió a Israel y lo convirtió en su pueblo. ¡Su nombre es el Dios todopoderoso!


Demuestras tu gran amor a miles de personas, pero también castigas a los hijos por el pecado de sus padres. ¡Tú eres grande y poderoso! ¡Por eso te llaman Dios del universo!


Entonces ordené que se presentaran ante mí todos los sabios de Babilonia para que me explicaran el sueño.


Por eso alabo y adoro al Rey del cielo, pues todo lo que hace está bien hecho. Él es un Dios justo, que humilla a los que son orgullosos.


En todas las naciones del mundo hay quienes reconocen mi grandeza, y por eso me presentan ofrendas aceptables.


Sin embargo, para nosotros solo hay un Dios, que es el Padre. Él creó todas las cosas, y nosotros vivimos para él. También hay solo un Señor, Jesucristo. Dios creó todo por medio de él, y gracias a él nosotros vivimos ahora.


Bien saben nuestros enemigos que sus dioses no tienen poder; ¡el poder es de nuestro Dios!


Y para terminar, Moisés dijo: «¡Israelitas, no hay otro Dios como vuestro Dios! Dios cabalga majestuoso sobre las nubes del cielo para venir en vuestra ayuda.


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