Isaías 19:2 - Biblia Lenguaje Básico2 Así dice Dios: «Haré que los egipcios se peleen unos con otros: el amigo contra su amigo, una ciudad contra otra, un reino contra otro reino. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 19602 Levantaré egipcios contra egipcios, y cada uno peleará contra su hermano, cada uno contra su prójimo; ciudad contra ciudad, y reino contra reino. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente2 «Yo haré que egipcio pelee contra egipcio: hermano contra hermano, vecino contra vecino, ciudad contra ciudad, provincia contra provincia. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)2 Azuzaré a los egipcios unos contra otros y se pelearán los hermanos entre sí, un amigo con otro, una ciudad con otra, un reino con otro reino. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion2 Incitaré a egipcios contra egipcios, Cada uno peleará contra su hermano Y cada uno contra su prójimo: Ciudad contra ciudad y reino contra reino. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 19752 Azuzaré a Egipto contra Egipto, pelearán unos contra otros, éstos contra aquéllos, ciudad contra ciudad, reino contra reino. Gade chapit la |
Escucha, Gog: cuando llegue ese día, enviaré contra ti toda clase de males. En todos mis montes te harán la guerra y tus soldados lucharán entre ellos mismos; yo les mandaré enfermedades, y sufriréis una muerte violenta; enviaré sobre ellos lluvias torrenciales, y granizo, fuego y azufre. Yo soy el Dios de Israel y cumpliré mi palabra.
Jesús se dio cuenta de lo que ellos pensaban y les dijo: —Si los habitantes de un país se pelean entre ellos, el país se destruirá. Si los habitantes de una ciudad se pelean unos contra otros, la ciudad se destruirá. Y si los miembros de una familia se pelean entre ellos, la familia también quedará destruida.
Reunió entonces Saúl a todos sus hombres y se lanzó decidido a la batalla creando una confusión tan grande entre los filisteos, que hasta se mataban unos a otros. Incluso algunos israelitas que durante mucho tiempo habían sido obligados a formar parte del ejército filisteo, en ese momento se unieron al ejército de Saúl y Jonatán. Y los israelitas que se habían escondido en la montaña de Efraín, al ver que los filisteos estaban huyendo, se pusieron también a perseguirlos. Así fue como la batalla llegó hasta Bet-Avén y aquel día Dios concedió la victoria a Israel.