Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Génesis 24:12 - Biblia Lenguaje Básico

12 Allí el mayordomo oró así: —Dios de mi amo Abrahán, te ruego que trates con bondad a mi amo y que hagas que hoy me vaya bien.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

12 Y dijo: Oh Jehová, Dios de mi señor Abraham, dame, te ruego, el tener hoy buen encuentro, y haz misericordia con mi señor Abraham.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

12 «Oh Señor, Dios de mi amo, Abraham —oró—. Te ruego que hoy me des éxito y muestres amor inagotable a mi amo, Abraham.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

12 Entonces el mayordomo oró así: 'Yavé, Dios de mi patrón Abrahán, haz que me vaya bien hoy y muestra tu benevolencia para con mi patrón Abrahán.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

12 y dijo: ¡YHVH, Dios de mi señor Abraham, haz que hoy me suceda, te ruego, haz misericordia a mi señor Abraham!

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

12 Y dijo: 'Yahveh, Dios de mi señor Abrahán, concédeme que tenga hoy buen encuentro, y muéstrate misericordioso con Abrahán, mi señor.

Gade chapit la Kopi




Génesis 24:12
29 Referans Kwoze  

Después de esto, Dios se le apareció a Abrán en una visión y le dijo: —Abrán, no tengas miedo. Yo soy quien te protege. Voy a premiarte generosamente.


Mientras tanto, el mayordomo la miraba sin decir nada, pues quería saber si Dios había hecho que su viaje tuviera éxito.


con estas palabras: —¡Alabado seas, Dios de mi amo Abrahán, pues siempre has sido bueno y fiel con mi amo! Por eso has guiado mis pasos hasta la casa de sus familiares.


Hoy, cuando llegué al pozo, hice esta oración: «Dios de mi amo Abrahán, si tú así lo quieres, haz que me vaya bien en este viaje.


luego me incliné para adorar y bendecir al Dios de mi amo Abrahán, pues me guio directamente hasta la nieta del hermano de mi amo, para tomarla como mujer para su hijo.


Esa misma noche Dios se le apareció y le dijo: —Yo soy el Dios de tu padre Abrahán, y por él te voy a bendecir y aumentaré el número de tus descendientes. No tengas miedo, pues yo estoy contigo, te ayudaré en todo.


Luego tú se lo llevarás para que lo coma, y así te dará su bendición especial antes de morir.


Pero Isaac le preguntó: —¿Y cómo es que has cazado un animal tan pronto? —Es que tu Dios me lo ha puesto a tiro —respondió Jacob.


Y vio también que Dios estaba de pie en la parte más alta de la escalera, y le decía: —Yo soy el Dios de Abrahán y de Isaac. A ti y a tus descendientes les daré la tierra donde ahora estás acostado.


Menos mal que el Dios de mi abuelo Abrahán y el de mi padre Isaac me ayudó! Me vio cansado y afligido, y anoche salió en mi defensa delante de ti. Si no lo hubiera hecho, tú me habrías despedido sin nada.


Siempre me tratas con mucha bondad, aunque no lo merezco, pues no soy más que un siervo tuyo. Cuando crucé el río Jordán, solo tenía un palo para defenderme, pero ahora tengo gente y ganado para formar dos grupos.


Luego Jacob hizo esta oración: —Dios mío, tú eres el Dios de mi abuelo Abrahán y de mi padre Isaac. Tú me ordenaste regresar a mi tierra, con mis parientes, y me prometiste tu ayuda.


Que el Dios todopoderoso haga que ese hombre tenga compasión de vosotros, y deje que Benjamín y su otro hermano regresen con vosotros. En cuanto a mí, si he de perder a todos mis hijos, tendré que aceptarlo.


Cuando llegó el momento de ofrecer el sacrificio, el profeta Elías se acercó y suplicó a Dios: —¡Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob! Haz que hoy todos sepan que tú eres el Dios de Israel; que sepan, además, que yo soy tu siervo y que he hecho todo esto porque tú me lo has ordenado.


golpeó el agua con el manto, y dijo: —¿Dónde está el Dios de Elías? Volvió a golpear el agua, y se dividió en dos; quedó así libre el paso, y Eliseo cruzó por un camino seco.


Oh Dios, escucha mi oración y las oraciones de tus servidores cuyo único deseo es honrarte. Haz que el rey me reciba bien y que yo tenga éxito». En ese tiempo yo era copero del rey Artajerjes.


El rey me preguntó: —¿Hay algo que pueda hacer por ti? Entonces, después de pedir ayuda a Dios todopoderoso,


Dios mío, ¡danos tu salvación!, ¡concédenos salir triunfantes!


Por ti le pedimos a Dios: «¡Que tengas paz, Jerusalén! ¡Que vivan en paz los que te aman!


Cántico de Salomón para las peregrinaciones. Si Dios no construye la casa, de nada sirve que se esfuercen los que la construyen. Si Dios no vigila la ciudad, de nada sirve que se desvelen los que la vigilan.


Pon tu vida en sus manos, confía plenamente en él, y él actuará en tu favor;


Yo soy el Dios de tus antepasados; yo soy el Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob. Al oír esto, Moisés no se atrevió a mirar a Dios y se tapó la cara.


Cuenta con Dios en todas tus acciones, y él te ayudará en todo.


«Yo soy el Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob». Por tanto, Dios no es Dios de muertos, sino de vivos.


No estéis preocupados por nada. Más bien, orad y pedid a Dios todo lo que necesitéis, y sed agradecidos.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite