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Génesis 22:8 - Biblia Lenguaje Básico

8 Abrahán le respondió: —Dios se encargará de darnos el cordero para el sacrificio, hijo mío. Y así siguieron juntos su camino.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

8 Y respondió Abraham: Dios se proveerá de cordero para el holocausto, hijo mío. E iban juntos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

8 —Dios proveerá un cordero para la ofrenda quemada, hijo mío —contestó Abraham. Así que ambos siguieron caminando juntos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Abrahán le respondió: 'Dios mismo proveerá el cordero, hijo mío. Y continuaron juntos el camino.

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La Biblia Textual 3a Edicion

8 Dijo Abraham: ’Elohim se proveerá el cordero para el holocausto, hijo mío. Y ambos iban juntos.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Contestó Abrahán: 'Dios se proveerá de cordero para el holocausto, hijo mío'. Y prosiguieron los dos juntos.

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Génesis 22:8
14 Referans Kwoze  

¿Hay algo que yo no pueda hacer? El año que viene, por estos días, volveré a visitarte, y para entonces Sara ya será madre.


Por eso Abrahán llamó a ese lugar «Dios dará lo necesario». De ahí procede el dicho que todavía hoy se escucha: «En su monte Dios da lo necesario».


Pero Isaac dijo a su padre Abrahán: —Padre mío, tenemos fuego y leña, pero ¿dónde está el cordero que vamos a ofrecerle a Dios?


Cuando llegaron al lugar señalado por Dios, Abrahán construyó un altar y sobre él preparó la leña para el fuego; luego ató a su hijo Isaac y lo puso sobre el altar.


Después Elías dijo a Eliseo: —Te ruego que te quedes aquí, porque Dios me mandó ir al río Jordán. Pero Eliseo contestó: —Te juro por Dios y por ti mismo que no te dejaré ir solo. Entonces se fueron los dos


Pero Amasías le respondió: —Pero si les pido que se vayan, no recuperaré los tres mil trescientos kilos de plata que les di. El profeta le aseguró: —Dios te dará mucho más que eso.


Jesús los miró y les dijo: —Para la gente eso es imposible de conseguir; pero para Dios todo es posible.


Al día siguiente, al ver que Jesús se acercaba, Juan dijo a los que estaban allí: —¡Aquí viene el Cordero de Dios. Por medio de él, Dios os perdonará todos los pecados.


Cuando vio que Jesús pasaba por allí, les dijo: —¡Mirad, ahí viene el Cordero de Dios!


A ese monstruo lo adorarán todos los habitantes de la tierra, menos los que tienen sus nombres escritos en el libro de la vida del Cordero que fue sacrificado, un libro escrito desde antes de que Dios creara el mundo.


Y decían con fuerte voz: —El Cordero que fue sacrificado merece recibir el poder y la riqueza, la sabiduría y la fuerza, el honor, la gloria y la alabanza.


Entonces vi un Cordero cerca del trono. En el cuerpo llevaba las marcas de haber sido sacrificado. Estaba de pie, rodeado por los cuatro seres vivientes y por los veinticuatro ancianos. Tenía siete cuernos y siete ojos que son los siete espíritus de Dios, enviados para recorrer toda la tierra.


Yo le respondí: —Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: —Son los que han pasado por un tiempo de gran sufrimiento que hubo en la tierra. Son aquellos a quienes se les han perdonado los pecados por medio de la muerte del Cordero.


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