Algún tiempo después, José dijo a sus hermanos: —Ya me falta poco para morir. Pero podéis estar seguros de que Dios vendrá a ayudaros y os hará volver a la tierra que, bajo juramento, prometió darles a Abrahán, a Isaac y a Jacob. Tenéis que jurarme que cuando esto ocurra os llevaréis de aquí mis restos.
En el cuarto año de su reinado en Israel, Salomón comenzó a construir el Templo de Dios. Esto sucedió en el mes de Ziv, cuando habían pasado cuatrocientos ochenta años desde que los israelitas habían salido de Egipto.
Un mes y medio después de haber salido de Egipto, los israelitas partieron de Elín y llegaron al desierto de Sin, que está entre Elín y el monte Sinaí.
Los israelitas salieron de la región de Refidín en dirección al desierto del Sinaí y acamparon al pie de la montaña. Cuando llegaron allí, habían pasado tres meses desde su salida de Egipto.
Por eso he venido a librarlos del poder egipcio. Los voy a llevar a una región muy grande y fértil que mana leche y miel. Es Canaán, país donde viven pueblos que no me conocen.
En cuanto a Moisés y Aarón, pertenecientes a estos clanes de la tribu de Leví, fueron los que recibieron la orden de hablar con el faraón, rey de Egipto, para que dejara salir a los israelitas de Egipto de forma organizada.
Así que vete y diles a los israelitas que yo soy su Dios, el que les va a liberar de la opresión de los egipcios y les va a librar de la esclavitud que ahora tienen que soportar; diles que con gran poder los rescataré y que castigaré duramente a los egipcios.
Esta son las etapas que los israelitas hicieron por el desierto después de salir de Egipto como un ejército bien organizado a las órdenes de Moisés y Aarón.
El Dios de Israel eligió a nuestros antepasados para hacer de ellos un gran pueblo, cosa que llevó a cabo mientras estuvieron en Egipto. Luego con su gran poder, los sacó de allí.
Moisés continuó diciendo al pueblo: —En el mes de Abib celebraréis la Pascua en honor de vuestro Dios. Recordad que fue en una noche del mes de Abib cuando Dios os libró de la esclavitud en Egipto.
Más tarde, envié a Moisés y a Aarón y, después de causar grandes desastres a los egipcios, hice salir de allí a vuestros antepasados y los guie hasta el mar de los Juncos. Cuando los egipcios los persiguieron con carros de guerra y caballos,