Esdras 4:2 - Biblia Lenguaje Básico2 Así que fueron a ver a Zorobabel y a los jefes judíos, y les dijeron: —Dejad que os ayudemos a reconstruir el Templo de Dios. Nosotros adoramos al mismo Dios que vosotros. Desde que el rey Asaradón de Asiria nos trajo a vivir aquí, hemos estado presentando ofrendas a Dios. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 19602 vinieron a Zorobabel y a los jefes de casas paternas, y les dijeron: Edificaremos con vosotros, porque como vosotros buscamos a vuestro Dios, y a él ofrecemos sacrificios desde los días de Esar-hadón rey de Asiria, que nos hizo venir aquí. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente2 fueron a ver a Zorobabel y a los otros líderes, y les dijeron: —Déjennos participar en la construcción junto con ustedes, porque nosotros también adoramos a su Dios. Le venimos haciendo sacrificios desde que el rey Esar-hadón, de Asiria, nos trajo a estas tierras. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)2 Fueron pues a ver a Zorobabel y a los jefes de familia y les dijeron: 'Vamos a construirlo junto con ustedes pues, al igual que ustedes, invocamos a su Dios y le ofrecemos sacrificios desde la época de Asarjadón, rey de Asiria, quien nos desterró para acá'. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion2 y se acercaron a Zorobabel y a las cabezas paternas, y les dijeron: Edificaremos con vosotros, porque buscamos a vuestro Dios, como vosotros, y a Él sacrificamos desde los días de Esar-hadón, rey de Asiria, que nos hizo subir aquí. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 19752 se presentaron a Zorobabel y a los jefes de familia, y les dijeron: 'Queremos colaborar con vosotros en la construcción, porque, al igual que vosotros, buscamos a vuestro Dios y le ofrecemos sacrificios desde los días de Asaradón, rey de Asiria, que nos hizo subir hasta aquí'. Gade chapit la |
¡Dios nuestro, qué poderoso eres! ¡Todos tiemblan ante ti! Eres un Dios fiel a los pactos que siempre cumple sus promesas y nunca deja de amarnos. Mira cuánto han sufrido nuestros reyes y nuestros dirigentes, nuestros sacerdotes y profetas, y también nuestros antepasados. Desde el momento en que caímos bajo el poder de los reyes de Asiria hasta este mismo día, tu pueblo no ha dejado de sufrir.
Esa clase de gente es enemiga de que se dé a conocer el verdadero mensaje de Dios. Tienen la mente corrompida y no son de fiar en lo que se refiere a la fe. Pero no podrán seguir así por mucho tiempo pues todos se darán cuenta de que esa gente es estúpida, como lo eran Janés y Jambrés, los magos que en Egipto se oponían a Moisés.