Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Eclesiastés 2:18 - Biblia Lenguaje Básico

18 También terminé por aborrecer el haber trabajado tanto en esta vida, pues el fruto de mi trabajo tendría que dejárselo a quien reinara después de mí.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

18 Asimismo aborrecí todo mi trabajo que había hecho debajo del sol, el cual tendré que dejar a otro que vendrá después de mí.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

18 Llegué a odiar todo el trabajo que hice en este mundo porque tengo que dejarles a otros lo que yo he ganado.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

18 Me puse a detestar todas las molestias que me había dado bajo el sol, puesto que debo dejarlo todo al que vendrá después de mí.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

18 Y aborrecí todo mi trabajo en que me había afanado debajo del sol, viendo que tenía que dejarlo a alguno que vendrá después de mí.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

18 Detesto cuanto yo mismo hice bajo el sol, porque habré de dejarlo a mi sucesor.

Gade chapit la Kopi




Eclesiastés 2:18
19 Referans Kwoze  

Me has dado una vida muy breve, ¡tan breve que no es nada para ti! ¡Nadie dura más que un suspiro!


No hay quien viva para siempre y nunca llegue a morir.


Toda mi sabiduría la dediqué a tratar de entender lo que pasa en este mundo. ¡Esta es la tarea que Dios nos dejó, y es una tarea muy pesada!


Realmente, en esta vida nada ganamos con tanto trabajar.


Luego me puse a pensar en todo lo que había hecho y en todo el trabajo que me había costado hacerlo, y me di cuenta de que nada de esto tenía sentido; todo había sido como querer atrapar el viento pues en esta vida nadie saca ningún provecho.


Resulta que algunos ponemos en juego nuestra sabiduría, nuestros conocimientos y experiencia, tan solo para dejar todos nuestros bienes a quien nunca hizo nada para ganárselos. También eso está mal y no tiene ningún sentido.


Cuando alguien agrada a Dios recibe de él sabiduría y conocimientos, y lo hace estar alegre; en cambio, Dios hace que el pecador trabaje y amontone muchos bienes, para luego dárselo todo a quien él quiere. ¡Pues tampoco esto tiene sentido! ¡Es como querer atrapar el viento!


Lo que sí he visto es que, cuando morimos, nadie nos trae de vuelta para ver lo que pasará después. Por eso, disfrutemos de nuestro trabajo, ya que esa es nuestra recompensa.


Aunque, en realidad, son más felices los que no han nacido, pues todavía no han visto la maldad que hay en este mundo.


Si Dios nos da muchos bienes y riquezas, también nos permite disfrutar de lo que nos da; disfrutemos entonces de lo que tanto trabajo nos ha costado, porque es un regalo de Dios.


Puesto que Dios nos ha dado una corta vida en este mundo, disfrutemos de cada momento con la mujer amada. ¡Disfrutemos cada día de esta vida sin sentido, pues esa es nuestra recompensa después de tanto trabajar!


Pero Dios le dijo: «¡Qué necio eres! Esta misma noche vas a morir, y otros disfrutarán de todo esto que has guardado».


Dios, por su bondad, me permitió actuar como si yo fuera el arquitecto de ese edificio. Y, como buen arquitecto, puse una base firme: os di la buena noticia de Jesucristo. Luego, otros construyeron sobre esa base. Pero cada uno debe estar atento a cómo construye;


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite