Daniel 11:2 - Biblia Lenguaje Básico2 Y ahora voy a explicarte lo que de verdad sucederá. Persia tendrá tres reyes. Después vendrá un cuarto rey, que será más rico que los tres anteriores. Será tan rico y poderoso que atacará al reino de Grecia. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 19602 Y ahora yo te mostraré la verdad. He aquí que aún habrá tres reyes en Persia, y el cuarto se hará de grandes riquezas más que todos ellos; y al hacerse fuerte con sus riquezas, levantará a todos contra el reino de Grecia. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente2 »Ahora te daré a conocer la verdad. Reinarán otros tres reyes persas y seguirá un cuarto rey, mucho más rico que los otros. Usará su riqueza para incitar a todos a luchar contra el reino de Grecia. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)2 en Persia surgirán todavía tres reyes y el cuarto será mucho más rico que los demás. Su riqueza lo volverá poderoso y hará todo lo posible para oponerse al reino de Yaván. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion2 Y ahora te anunciaré la verdad: He aquí que se levantarán todavía tres reyes en Persia, y el cuarto se hará de grandes riquezas más que todos ellos, y cuando se haya hecho fuerte por medio de sus riquezas, agitará a todos contra el reino de Grecia. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 19752 'Ahora te revelaré la verdad: habrá aún tres reyes en Persia, y el cuarto acumulará mayores riquezas que todos los demás. Cuando gracias a sus riquezas aumente su poder, concitará a todos contra el reino de Grecia. Gade chapit la |
Asuero, el rey de Persia, gobernaba sobre ciento veintisiete provincias que se extendían desde la India hasta Etiopía. La capital de su reino se llamaba Susa. En el tercer año de su reinado, Asuero organizó una gran fiesta para todos los funcionarios y personajes importantes del país. También invitó a los jefes de los ejércitos de Persia y Media, y a las autoridades y gobernadores de las provincias.
Cuando Ciro llevaba ya tres años como rey de Persia, Daniel, llamado también Baltasar, tuvo una visión de una gran guerra. La visión era difícil de entender, pero Daniel se propuso entenderla, y consiguió comprender su mensaje. Durante tres semanas, yo Daniel, estuve muy triste. No comí carne ni tomé vino, ni probé nada de lo que me gustaba ni me puse ningún perfume hasta que pasaron las tres semanas.