Daniel 1:8 - Biblia Lenguaje Básico

⁸ Daniel decidió no comer ni beber lo que se servía en la mesa del rey, porque para él eso era un pecado. Por ello le pidió a Aspenaz que no los obligara a pecar ni a él ni a sus amigos comiendo esos alimentos.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁸ Y Daniel propuso en su corazón no contaminarse con la porción de la comida del rey, ni con el vino que él bebía; pidió, por tanto, al jefe de los eunucos que no se le obligase a contaminarse.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ Sin embargo, Daniel estaba decidido a no contaminarse con la comida y el vino dados por el rey. Le pidió permiso al jefe del Estado Mayor para no comer esos alimentos inaceptables.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ Daniel decidió no mancharse comiendo de lo que se servía el rey o bebiendo de su vino. Le pidió pues al jefe de los eunucos que no lo obligara a comer esa comida impura.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ Daniel decidió en su corazón no contaminarse con la comida del rey ni con el vino que bebía, por lo que pidió al príncipe de los eunucos que lo dispensara de esa contaminación.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ Daniel decidió en su interior no contaminarse con los manjares del rey ni con el vino de su mesa, y por eso pidió al jefe de los eunucos que le dispensara de la contaminación.

Daniel 1:8 Referans Kwoze

1 Reyes 5:5

Durante todo el reinado de Salomón los habitantes de Israel y Judá, desde Dan hasta Berseba, vivieron con tranquilidad, paz y seguridad, descansando cada uno bajo su parra y su higuera.

Salmos 106:28

Pero ellos prefirieron adorar al dios Baal de la ciudad de Pegor, y comieron de las ofrendas que se hacen a dioses sin vida.

Salmos 119:106

Cumpliré la promesa que te hice: obedeceré tus justos mandamientos.

Salmos 141:4

No me dejes tener malos pensamientos, ni cometer maldad alguna. No me dejes tomar parte en fiestas de gente malvada.

Proverbios 23:3

No te dejes engañar por la apariencia de manjares sabrosos.

Daniel 5:4

Y mientras bebían, cantaban alabanzas a sus dioses, que eran simples estatuas de oro, plata, cobre, hierro, madera y piedra.

Hechos 11:23

Bernabé era un hombre bueno, lleno de Espíritu Santo y de fe. Cuando llegó y vio que Dios había bendecido a toda aquella gente, se alegró mucho y los animó para que se mantuvieran fieles al Señor. Y fueron muchos los que escucharon a Bernabé y aceptaron el mensaje de Dios.

Hechos 15:20

Solo debemos escribirles una carta y pedirles que no coman nada que haya sido ofrecido a los ídolos. Que tampoco coman carne de animales que hayan muerto ahogados o carne que todavía contenga sangre. Además, deberán evitar las relaciones sexuales prohibidas por la ley.

1 Corintios 7:37

Pero si alguno no se siente obligado a casarse y puede controlar sus deseos, hará bien en no casarse.

2 Corintios 9:7

Cada uno debe dar según crea que deba hacerlo. No tenemos que dar con tristeza ni por obligación. ¡Dios ama al que da con alegría!

Deuteronomio 32:38

¿Dónde están esos dioses a quienes llevabais ofrendas? ¡Que vengan ahora a ayudaros!