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Apocalipsis 7:10 - Biblia Lenguaje Básico

10 y gritaban con fuerte voz: —La salvación se debe a nuestro Dios, que está sentado en el trono, y también al Cordero.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

10 y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

10 Y gritaban con gran estruendo: «¡La salvación viene de nuestro Dios que está sentado en el trono y del Cordero!».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

10 y gritaban con voz poderosa: '¿Quién salva fuera de nuestro Dios, que se sienta en el trono, y del Cordero?'

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La Biblia Textual 3a Edicion

10 Y claman a gran voz, diciendo: ¡Atribúyase° la salvación a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero!

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

10 Y gritan con gran voz, diciendo: 'La salvación se debe a nuestro Dios, al que está sentado en el trono, y al Cordero'.

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Apocalipsis 7:10
26 Referans Kwoze  

Dios mío, engrandece tu nombre y no el nuestro; solo tú mereces alabanzas por tu amor y tu fidelidad.


Actúa, Dios mío, y ponme a salvo. ¡Rómpeles la cara a mis enemigos! ¡Rómpeles los dientes a los malvados!


Dios salva a los buenos. Cuando llegan los días malos, Dios es su único refugio.


Solo yo soy Dios, solo yo puedo salvaros.


Porque tú, Dios nuestro, eres un Dios misterioso, el Dios salvador de Israel.


Vayamos a juicio a ver si podéis responderme: ¿Quién anunció estas cosas mucho antes de que sucedieran? Fui yo, el único Dios, y no hay otro dios fuera de mí. Solo yo soy justo y salvador y fuera de mí no existe ningún otro.


De nada nos sirve ir a las colinas, ni lanzar nuestros gritos en las montañas. Solamente en ti, Dios nuestro, hallaremos nuestra salvación.


Así dice Dios a su pueblo: «Israel, yo soy tu Dios; no tienes otro salvador». Yo he sido tu único Dios desde que estabas en Egipto.


Los que adoran a otros dioses, es porque se han olvidado de que tú, oh Dios, los amas.


Lo que era una montaña de escombros, tú, Zorobabel, lo convertirás en llanura y cuando pongas la piedra principal para reconstruir mi Templo, mi pueblo gritará con alegría: ¡Qué hermosa es! ¡Qué hermosa es!


¡Alégrate, ciudad de Jerusalén, salta de júbilo, monte de Sion! Porque tu rey viene hacia ti, montado sobre un burro, sobre un asno, hijo de asna. Es humilde, pero justo, y viene como vencedor.


¡Todo el mundo verá al Salvador que Dios envía!».


Al día siguiente, al ver que Jesús se acercaba, Juan dijo a los que estaban allí: —¡Aquí viene el Cordero de Dios. Por medio de él, Dios os perdonará todos los pecados.


Cuando vio que Jesús pasaba por allí, les dijo: —¡Mirad, ahí viene el Cordero de Dios!


Vosotros los samaritanos no sabéis a quién adoráis. Pero nosotros los judíos sí sabemos a quién adoramos, porque el salvador saldrá de los judíos.


Habéis sido salvados gratuitamente por haber creído en Dios. Ninguno de vosotros se ganó la salvación, sino que Dios os la regaló.


Entonces oí que una fuerte voz decía en el cielo: —Nuestro Dios ha salvado a su pueblo; ha mostrado su poder y es el único rey. Su Mesías gobierna sobre todo el mundo, mientras que el diablo, el que día y noche acusaba a nuestros hermanos delante de nuestro Dios, ha sido arrojado del cielo.


Después de esto, me pareció escuchar en el cielo las fuertes voces de una multitud de personas que cantaban: —¡Aleluya! Nuestro Dios es poderoso y nos ha salvado; a él le pertenecen el poder y la gloria,


Y dijo el que estaba sentado en el trono: —¡Yo hago todo nuevo! Y también dijo: —Escribe, porque estas palabras son verdaderas y dignas de ser creídas.


En esa ciudad no habrá ya nada que desagrade a Dios. Allí estará el trono de Dios y del Cordero, y los servidores de Dios lo adorarán.


Delante del trono había también algo que parecía un mar y que era transparente como el cristal. En el centro del círculo, alrededor del trono, había cuatro seres vivientes que tenían ojos en todo el cuerpo, por delante y por detrás.


El Cordero fue y tomó el libro enrollado que tenía en la mano derecha el que estaba sentado en el trono.


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