2 Reyes 17:16 - Biblia Lenguaje Básico16 Desobedecieron todos los mandamientos de su Dios, y fabricaron dos becerros de oro para adorarlos. Además, hicieron una imagen de Astarté, y adoraron a Baal y al sol, la luna y las estrellas. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 196016 Dejaron todos los mandamientos de Jehová su Dios, y se hicieron imágenes fundidas de dos becerros, y también imágenes de Asera, y adoraron a todo el ejército de los cielos, y sirvieron a Baal; Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente16 Los israelitas rechazaron todos los mandatos del Señor su Dios e hicieron dos becerros de metal. Levantaron un poste dedicado a la diosa Asera y rindieron culto a Baal y veneraron a todas las fuerzas del cielo. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)16 Abandonaron todos los mandamientos de Yavé, su Dios, y se hicieron ídolos de metal ¡sus dos terneros! Erigieron postes sagrados, se postraron ante todos los poderes del cielo, y sirvieron a Baal. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion16 Y abandonaron todos los mandamientos de YHVH su Dios, y se hicieron imágenes de fundición: Dos becerros y una Asera,° y se postraron ante todo el ejército de los cielos, y sirvieron a Baal. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 197516 Abandonaron todos los preceptos de Yahveh, su Dios, y se hicieron ídolos fundidos, los dos becerros, y también aserás, se postraron ante todo el ejército del cielo y dieron culto a Baal. Gade chapit la |
Dios hará sufrir a Israel que será como una caña arrastrada por la corriente del río. Israel ha provocado la ira de Dios al fabricar imágenes de la diosa Astarté; pues bien, Dios lo abandonará y lo sacará de esta buena tierra que le dio en el pasado y lo dispersará más allá del río Éufrates. Todo esto pasará por culpa de Jeroboán, quien pecó contra Dios y también hizo pecar a Israel.
sino que vamos a seguir haciendo lo que hemos decidido, tal como lo hicieron nuestros antepasados, nuestros reyes y nuestros dignatarios en las ciudades de Judá y en las plazas de Jerusalén. Seguiremos adorando a nuestra diosa, la Reina del Cielo, y le ofreceremos incienso y vino. En realidad, cuando lo hacíamos, teníamos comida en abundancia y no nos faltaba nada ni nos pasaba nada malo.