2 Crónicas 28:3 - Biblia Lenguaje Básico3 y en su honor quemó incienso en el valle de Ben Hinón. ¡Incluso mandó quemar a sus hijos y los ofreció en sacrificio! Siguió así las vergonzosas costumbres de naciones que Dios había expulsado ante los israelitas. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 19603 Quemó también incienso en el valle de los hijos de Hinom, e hizo pasar a sus hijos por fuego, conforme a las abominaciones de las naciones que Jehová había arrojado de la presencia de los hijos de Israel. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente3 Ofreció sacrificios en el valle de Ben-hinom y hasta sacrificó a sus hijos en el fuego. De esta manera, siguió las prácticas detestables de las naciones paganas que el Señor había expulsado de la tierra al paso de los israelitas. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)3 Además, quemó incienso en el valle de Ben-Hinom y sacrificó sus hijos por el fuego, imitando las costumbres abominables de los paganos a los que Yavé quitó el país para dárselo a Israel. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion3 Él mismo quemó incienso en el valle de Ben-hinom,° e hizo pasar a sus hijos por el fuego, conforme a las abominaciones de los pueblos que YHVH había expulsado de delante de los hijos de Israel. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 19753 Quemó, además, incienso en el valle de Ben Hinón e incluso hizo pasar a sus hijos por el fuego, conforme a las abominaciones de la gentes que Yahveh había arrojado de delante de los israelitas. Gade chapit la |
Puso la imagen de un ídolo en el Templo de Dios, practicó la hechicería y la brujería, y se hizo amigo de brujos y espiritistas. También hizo quemar a su hijo como un sacrificio en el valle de Ben Hinón. Su comportamiento fue tan malo, que Dios se enfureció con él. Dios había dicho a David y a su hijo Salomón: «Entre todas las tribus de Israel, he elegido a Jerusalén y este Templo como lugar donde se invoque mi nombre para siempre.
También han construido altares en el valle de Ben Hinón para adorar a Baal. Pero lo que más aborrezco es que en esos altares han ofrecido a sus hijos y a sus hijas en honor del dios Moloc. Yo jamás les ordené que hicieran eso, y ni siquiera me pasó por la mente que los habitantes de Judá pudieran cometer tal atrocidad.
Moisés continuó diciéndoles: —Cuando entréis en la tierra que Dios va a daros, os encontraréis con que la gente que allí vive tiene costumbres terribles que no agradan a Dios. Por ejemplo, esa gente entrega a sus hijos para quemarlos en honor de sus dioses, practica la brujería y la hechicería, y cree que puede adivinar el futuro. Además de sus brujerías, consultan a los espíritus de los muertos para pedirles consejo. Pero vosotros debéis obedecer a vuestro Dios en todo y tener cuidado de no seguir el mal ejemplo de esa gente, pues vuestro Dios los odia y por eso quiere expulsarlos de entre vosotros.