Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





1 Crónicas 21:9 - Biblia Lenguaje Básico

9-12 Entonces, Dios dirigió estas palabras al profeta Gad, el profeta al que David solía consultar: —Preséntate ante David y dile que lo voy a castigar. Puede escoger uno de estos tres castigos: Tres años de hambre en todo el país; ser perseguido por sus enemigos durante tres meses; o que yo envíe mi ángel exterminador y que durante tres días la peste y la muerte caigan sobre todo el país causando una gran destrucción en todo el territorio de Israel. Gad se presentó ante David, le transmitió el mensaje y le dijo: —Piénsatelo y decide qué respuesta debo llevar a Dios.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

9 Y habló Jehová a Gad, vidente de David, diciendo:

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Entonces el Señor le habló a Gad, el vidente de David, y le dio este mensaje:

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

9 Y Yavé habló a Gad, profeta de David, para decirle:

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

9 Y habló YHVH a Gad, vidente de David, diciendo:

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 Yahveh habló a Gad, vidente de David, diciéndole:

Gade chapit la Kopi




1 Crónicas 21:9
7 Referans Kwoze  

Al día siguiente, cuando David se estaba levantando, Dios dirigió estas palabras al profeta Gad, el profeta al que David solía consultar:


Los hechos más importantes de la historia del rey David, desde el principio hasta el fin, están escritos en las historias de los profetas Samuel, Natán y Gad. En ellos se narran no solo los hechos más importantes con respecto al reinado de David y su poderío, sino también con respecto a cuanto aconteció a Israel y a sus países vecinos.


Tiempo atrás, Dios había indicado a David y a los profetas Gad y Natán que los levitas debían acompañar el culto con instrumentos musicales. Cuando los levitas con los instrumentos musicales indicados por David, y los propios sacerdotes provistos de trompeta, se colocaron en sus puestos, Ezequías dio la orden de ofrecer el sacrificio sobre el altar. En el momento de comenzar el sacrificio, empezaron también los cánticos en honor de Dios y el resonar de las trompetas y otros instrumentos indicados por David, rey de Israel. Mientras terminaban de ofrecer el sacrificio, el pueblo adoraba a Dios de rodillas, proseguían los cánticos y resonaban las trompetas.


Cierto día, el profeta Gad fue a ver a David y le dijo: —No te quedes en tu escondite. Es mejor que vayas a la tierra de Judá. Y David se fue al bosque de Járet.


Saúl le contestó: —Está bien, vamos. En aquellos días, cuando alguien en Israel tenía problemas y quería que Dios le indicara cómo resolverlos, decía: «Consultemos al vidente». Así se llamaba entonces a quien hoy consideramos «profeta».


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite