Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Éxodo 20:20 - Biblia Septuaginta al Español

20 Y díjoles Moisés: «No temáis, pues, para probaros ha venido Dios; para que su temor esté en vosotros; para que no pequéis».

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

20 Y Moisés respondió al pueblo: No temáis; porque para probaros vino Dios, y para que su temor esté delante de vosotros, para que no pequéis.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

20 —¡No tengan miedo! —les respondió Moisés—, porque Dios ha venido de esta manera para ponerlos a prueba y para que su temor hacia él les impida pecar.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

20 Moisés les respondió: 'No teman, pues Dios ha venido para probarlos; él quiere que su temor permanezca en ustedes y así no pequen.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

20 Y dijo Moisés al pueblo: No temáis, pues para probaros ha venido ’Elohim, a fin de que el temor a Él esté ante vosotros, de modo que no pequéis.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

20 Respondió Moisés al pueblo: 'No temáis, que Dios ha venido para poneros a prueba y para que tengáis ante vuestros ojos su temor y no pequéis'.

Gade chapit la Kopi




Éxodo 20:20
22 Referans Kwoze  

no escucharás las palabras de aquel profeta o soñador, pues os tienta el Señor, vuestro Dios, para ver si amáis a vuestro Dios de todo vuestro corazón y de toda vuestra alma.


No seas prudente ante ti mismo; teme, empero, a Dios, y declina de todo lo malo;


Y dijo Samuel al pueblo: «No temáis; vosotros habéis hecho toda esta maldad; empero no os desviéis de en pos del Señor; y servid al Señor en todo vuestro corazón.


al Señor, a él santificad(h) ; y él será tu temor;


Principio de camino bueno es hacer lo justo; y acepto ello ante Dios más que sacrificar sacrificios.


Y dijo al hombre: «He aquí el temor divino es sabiduría; y el abstenerse de lo malo, es ciencia».


Y recordarás todo el camino que te trajo el Señor, tu Dios, estos cuarenta años en el desierto, para afligirte y tentarte, y conocer lo de dentro de tu corazón: si guardarás sus mandamientos, o no.


Y aconteció después de estas cosas, tentar Dios a Abrahán y decirle: «¡Abrahán! ¡Abrahán!»


No temas; que contigo soy; no yerro; pues yo soy tu Dios; que te he fortalecido, y ayudádote y asegurádote con la diestra la justa, mía.


Principio de sabiduría, temor de Dios; y entendimiento bueno a todos los que la hacen; y piedad para con Dios, principio del sentir; pero sabiduría y disciplina los impíos menosprecian.


Y las primeras exacciones que hubo antes de mí, gravaron sobre ellos y tomaron de ellos, en panes y en vino, fuera de(e) dinero, siclos cuarenta (también los subordinados de ellos señorean al pueblo). Y yo no hice así a la faz del temor de Dios.


Y ahora temed al Señor y servidle en rectitud y en justicia y quitad en torno los dioses ajenos, a quien sirvieron nuestros padres en lo de allende el río y en Egipto, y servid al Señor.


Y ahora, Israel ¿qué te pide el Señor, sino que temas al Señor, tu Dios y andes en todos sus caminos, y le ames y sirvas al Señor, tu Dios, de todo tu corazón y de toda tu alma;


a fin de que temáis al Señor, vuestro Dios, guardando todos sus preceptos y sus mandamientos, que te mando hoy, tú y tus hijos, y los hijos de tus hijos, todos los días de tu vida para que se prolonguen vuestros días.


el día que estuvisteis a faz del Señor, en Horeb, cuando me dijo el Señor: «Congrega junto a mí al pueblo, y oigan mis palabras, porque aprendan a temerme todos los días que vivieren sobre la tierra; y a sus hijos enseñen»(d) .


Y dijo: «No pongas tu mano en el niñito, ni le hagas nada; pues ahora he conocido que temes a Dios tú, y no has perdonado a tu hijo querido, por mí».


Y dijo Abrahán: «Pensé dentro de mí, diciendo: «Acaso no hay temor de Dios en este lugar; y me matarán por mi mujer.


Y dijo Moisés al pueblo: «No temáis: paraos y ved la salvación, la de Dios; la que nos hará hoy; pues tales como veis a los egipcios hoy, no los volveréis a ver eternamente.


Y mandónos el Señor hacer todos estos preceptos, temer al Señor, nuestro Dios, para que bien nos vaya todos los días; para que vivamos, al modo que hoy.


Pues yo, tu Dios, el que cojo tu diestra, el que te digo: No temas,


quien te sustentó con maná en la soledad, el que no conocieron tus padres, para afligirte y tentarte, y bien hacerte en los postreros de tus días.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite