Abdías 1:12 - Biblia Septuaginta al Español

¹² Y no despreciarás(c) el día de tu hermano, en día de extranjeros, y no te alegrarás por los hijos de Judá, en día de la perdición de ellos; y no te jactarás en día de tribulación;

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹² Pues no debiste tú haber estado mirando en el día de tu hermano, en el día de su infortunio; no debiste haberte alegrado de los hijos de Judá en el día en que se perdieron, ni debiste haberte jactado en el día de la angustia.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹² »No debiste alegrarte cuando desterraron a tus parientes a tierras lejanas. No debiste gozarte cuando el pueblo de Judá sufría semejante desgracia. No debiste hablar con arrogancia en ese terrible tiempo de angustia.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹² No te alegres de la ruina de tu hermano en el día de su desgracia. No hagas burla de los hijos de Judá en el día de su angustia, no te rías de su miseria.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹² No recrees tu vista en el día de tu hermano, En el día de su calamidad; Ni te alegres a costa de los hijos de Judá En el día de su destrucción, Ni te jactes° en el día de su angustia,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹² No te deleites mirando a tu hermano en el día de su desgracia; no te alegres de los hijos de Judá en el día de su ruina; no digas palabras insolentes en el día de su angustia.

Abdías 1:12 Referans Kwoze

Miqueas 4:11

Y ahora se han congregado en ti gentes muchas diciendo: «Nos alegraremos, y mirarán sobre Sión nuestros ojos».

Ezequiel 35:15

páramo serás, monte de Seír, y toda la Idumea, también consumida será; conoceréis que yo soy el Señor, el Dios de ellos.»

Proverbios 17:5

Quien se mofa de mendigo, irrita a quien le hizo; y quien se alegra del que perece, no quedará impune; y el que entrañable se apiada, compadecido será.

1 Samuel 2:3

No os gloriéis, y no habléis lo excelso por soberbia; no salga grandilocuencia de vuestra boca, que Dios de ciencias es el Señor; y Dios previniendo sus designios.

2 Pedro 2:18

Pues, la hinchazón de la vanidad hablando, ceban, en apetitos de carne, con lascivias a los que apenas se habían evadido de los que en error conversan;

Judas 1:16

Estos son murmuradores querellosos, según sus concupiscencias caminando; y su boca habla cosas altaneras; admirando personas por ganancia.

Salmos 37:13

y violentádome los que buscaban mi alma; y los que buscaban mal para mí, han hablado vanidades, y maquinaciones, todo el día, meditado.

Salmos 31:18

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Salmos 22:17

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Job 31:29

Y si también gozoso me puse a la caída de mis enemigos, y dijo mi corazón: «¡Muy bien!»,

Apocalipsis 13:5

Y diósele boca para hablar cosas grandes y blasfemias; y diósele potestad de hacer, meses cuarenta y dos.

Santiago 3:5

Así también la lengua pequeño miembro es, y muy grande se jacta(a) . He aquí cuánto(b) fuego, cuánta selva enciende;

Lucas 19:41

Y, como se acercó, viendo la ciudad, lloró sobre ella, diciendo:

Lamentaciones 4:21

Alégrate y regocíjate, hija de Idumea, la que habitas sobre la tierra(i) ; también sobre ti pasará el cáliz del Señor; te embriagarás, y derramarás. Tau

Isaías 37:24

Pues, por mensajeros, has oprobiado al Señor. Porque tú has dicho: «Con la muchedumbre de los carros, yo he subido a altura de montes y hasta lo postrero del Líbano y cortado la altura de su cedro y la hermosura del ciprés e internádome en la altura de parte del bosque;

Salmos 92:11

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Salmos 59:10

¿Quién me llevará a la ciudad de fortificación?», ¿Quién me encaminará hasta Idumea?

Salmos 54:7

He aquí me he alejado huyendo, y permanecido en la soledad(a) .

Job 18:20

sobre él han gemido los últimos; y a los primeros(h) ha cogido asombro.

Salmos 35:15

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Lamentaciones 2:16

Abrieron sobre ti su boca todos tus enemigos; silbaron y rechinaron de dientes; y dijeron: «Devorádola hemos; sí, éste, el día que esperábamos: hémoslo hallado, visto.» Fe

Ezequiel 35:12

y conocerás que yo soy el Señor. He oído la voz de tus blasfemias, pues dijiste: «Los montes de Israel son yermos: a nosotros han sido dados en devoración»;

Ezequiel 36:5

por esto, esto dice el Señor Señor: «¡Si ya en fuego de mi furor he hablado sobre las demás gentes, sobre la Idumea toda; pues se han dado mi tierra en posesión con alegría, vilipendios de almas para aniquilar en botín!...