2 Samuel 19:21 - Biblia Septuaginta al Español

²¹ Y respondió Abisaí, hijo de Sarvía y dijo. «¿Acaso por esto no será muerto Semeí porque maldijo al ungido del Señor?»

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²¹ Respondió Abisai hijo de Sarvia y dijo: ¿No ha de morir por esto Simei, que maldijo al ungido de Jehová?

Biblia Nueva Traducción Viviente

²¹ Entonces Abisai hijo de Sarvia dijo: —¡Simei debe morir, porque maldijo al rey ungido por el Señor!

Biblia Católica (Latinoamericana)

²¹ Tu servidor sabe muy bien que pecó, pero ahora ha sido el primero de toda la casa de Israel en venir al encuentro del rey mi señor'.

La Biblia Textual 3a Edicion

²¹ Pero Abisai, hijo de Sarvia, respondió y dijo: ¿No ha de ser muerto Simei, por cuanto maldijo al ungido de YHVH?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²¹ Porque yo, tu siervo, reconozco que he pecado. ¡Y hoy vengo el primero de toda la casa de José y he bajado al encuentro de mi señor, el rey!'.

2 Samuel 19:21 Referans Kwoze

Éxodo 22:28

A dioses(j) no maldecirás; y de los príncipes de tu pueblo no hablarás mal.

1 Samuel 26:9

Y dijo David a Abisaí: «No le humilles, pues ¿quién pondrá su mano en ungido del Señor y será inocente?»

2 Samuel 16:13

Y anduvo David y todos sus varones en el camino; y Semeí iba por la falda del monte, junto a él, yendo y maldiciendo y apedreando en piedras por el lado de él y con polvo tirando.

2 Samuel 16:5

Y vino el rey David hasta Bahurim; y he aquí, de allí un varón salía, de parentela de casa de Saúl; y su nombre: Semeí, hijo de Gerá; salió avanzando y maldiciendo

1 Samuel 24:6

Y aconteció, después de esto, golpear el corazón de David a él por haber quitado la punta de su clámide.

2 Samuel 16:9

Y dijo Abisaí, hijo de Sarvía, al rey: «¿Por qué maldice el perro, el muerto éste, a mi señor, al rey? Pasaré ahora, y arrancaré su cabeza».

Salmos 84:9

y sobre sus santos y los que vuelven a él el corazón;

Lamentaciones 4:20

Espíritu de nuestra faz, ungido el Señor fue cogido en las corrupciones de ellos; del que decíamos: «A la sombra de él viviremos en las gentes.» Ysen