2 Reyes 5:1 - Biblia Septuaginta al Español1 Y Naamán, el príncipe del ejército de Siria era varón grande a faz de su señor, y muy admirado de rostro, pues en él dio el Señor salud a Siria; y el varón era poderoso en fuerza; pero estaba leproso. Gade chapit laPlis vèsyonBiblia Reina Valera 19601 Naamán, general del ejército del rey de Siria, era varón grande delante de su señor, y lo tenía en alta estima, porque por medio de él había dado Jehová salvación a Siria. Era este hombre valeroso en extremo, pero leproso. Gade chapit laBiblia Nueva Traducción Viviente1 El rey de Aram sentía una gran admiración por Naamán, el comandante del ejército, porque el Señor le había dado importantes victorias a Aram por medio de él; pero a pesar de ser un poderoso guerrero, Naamán padecía de lepra. Gade chapit laBiblia Católica (Latinoamericana)1 Naamán era el comandante en jefe del ejército del rey de Aram. Era un hombre muy estimado por su señor; era su favorito porque por su intermedio había Yavé dado la victoria a los arameos. Pero ese hombre valiente era leproso. Gade chapit laLa Biblia Textual 3a Edicion1 Naamán, capitán del ejército del rey de Siria, era un hombre muy estimado por su señor, porque por su intermedio YHVH había dado victoria° a Siria. Era además valeroso en extremo, pero leproso. Gade chapit laBiblia Serafín de Ausejo 19751 Naamán, jefe del ejército del rey de Aram, era un hombre importante que gozaba de gran favor ante su señor, porque por su medio había otorgado Yahveh la victoria a Aram. Pero este hombre, de probada valentía, estaba leproso. Gade chapit la |
Pero Mardoqueo desempeñaba el cargo más importante del reino, después del rey Artajerjes, y grande era en el reino y glorificado por los judíos, y amado, narraba su educación a toda su gente. Y dijo: «De Dios ha venido esto; pues acuérdome del sueño que vi acerca de estas palabras; pues no ha pasado de ellas palabra alguna. La pequeña fuente, la que se hizo río, y era luz y sol y agua mucha, —Ester es el río con la que se casó el rey e hizo reina; y los dragones, yo soy y Amán; empero las gentes reunidas para borrar el nombre de los judíos y la gente mía, éste es Israel, los que clamaban a Dios y fueron salvos. Y salvó el Señor a su pueblo, y nos libró el Señor de todos estos males; he hizo Dios las señales grandes las que no han sido en las gentes. Por esto hizo suertes dos: una para el pueblo de Dios, y una para todas las gentes. Y vinieron estas dos suertes a hora y sazón, y a día de juicio, delante de Dios y a todas las gentes. Y acordóse Dios de su pueblo y justificó a su heredad. Y serán para ellos estos días en el mes de Adar, el catorce y el quince del mes, con reunión y gozo y alegría, delante de Dios, por generación por el siglo, en su pueblo de Israel.