Salmos 133:2 - Biblia Martin Nieto

² Es como un perfume fino en la cabeza, que baja por la barba, por la barba de Aarón, y llega hasta la orla de su manto.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

² Es como el buen óleo sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, Y baja hasta el borde de sus vestiduras;

Biblia Nueva Traducción Viviente

² Pues la armonía es tan preciosa como el aceite de la unción que se derramó sobre la cabeza de Aarón, que corrió por su barba hasta llegar al borde de su túnica.

Biblia Católica (Latinoamericana)

² Es como un aceite refinado que desde su cabeza desciende hasta la barba, la barba de Aarón, hasta el cuello de su túnica.

La Biblia Textual 3a Edicion

² Es como el buen óleo sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, Y baja hasta el borde de sus vestiduras.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

² Es como óleo fragante que cae sobre la cabeza, por la barba desciende -la barba de Aarón, que le baja hasta la franja del vestido-,

Salmos 133:2 Referans Kwoze

Salmos 141:5

que me hiera un justo, que un hombre piadoso me reprenda, pero que la fragancia del criminal jamás perfume mi cabeza; pues a sus crímenes yo opondré siempre mi oración.

Éxodo 28:33

En su vuelo inferior pondrás granadas de púrpura violeta, púrpura escarlata y carmesí y, entre ellas, todo alrededor, campanillas de oro.

Éxodo 29:7

Tomas el óleo de la unción y lo unges derramándolo sobre su cabeza.

Éxodo 30:35

Harás con ellos un incienso perfumado, trabajo de perfumista, salado, puro y santo.

Éxodo 39:24

Adornaron el vuelo inferior con granadas de lino fino trenzado, en púrpura violeta, escarlata y carmesí.

Proverbios 27:9

El perfume y el incienso alegran el corazón, el consejo y la ciencia son la delicia del alma.

Cantares 1:3

Más dulces que el vino tus amores son, suave es el olor de tus perfumes. Tu nombre es un perfume refinado; por eso las jóvenes se enamoran de ti.

Levítico 8:12

Derramó el óleo de la unción sobre la cabeza de Aarón, lo ungió y lo consagró.

Juan 12:3

María, por su parte, tomó una libra de perfume de nardo puro, de gran precio, y ungió los pies de Jesús, enjugándolos luego con sus cabellos, por lo que la casa se llenó del olor del perfume.