Lamentaciones 5:8 - Biblia Martin Nieto

⁸ Esclavos mandan en nosotros y nadie nos libra de su mano.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁸ Siervos se enseñorearon de nosotros; No hubo quien nos librase de su mano.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁸ Los esclavos son ahora nuestros amos; no ha quedado nadie para rescatarnos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁸ Esclavos nos dominan y no hay quien nos libre de su poder.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁸ Unos esclavos nos señorean, Y no hay quien pueda librarnos de su mano;

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁸ Esclavos nos dominan, no hay quien nos libre de su mano.

Lamentaciones 5:8 Referans Kwoze

Génesis 9:25

y dijo: '¡Maldito sea Canaán! Sea el último de los esclavos de sus hermanos'.

Nehemías 2:19

Pero al enterarse de ello Sambalat, el joronita, Tobías, el funcionario amonita, y Guesen, el árabe, se burlaron de nosotros y dijeron con desprecio: '¿Qué es lo que estáis haciendo? ¿Os vais a rebelar contra el rey?'.

Nehemías 5:15

en cambio, los gobernadores que me habían precedido habían gravado al pueblo, percibiendo de él, en concepto de pan y vino, cuarenta monedas de plata cada día; y sus criados también oprimían al pueblo; pero yo no obré así, porque temía a Dios.

Job 10:7

Sabes muy bien que yo no soy culpable y que nadie me puede salvar de tus manos.

Job 5:4

Sus hijos se ven abandonados, sin apoyo; sin defensor, pisoteados a la puerta;

Salmos 50:22

Entended esto bien los que olvidáis a Dios, si no queréis que os destroce y no haya quien os salve;

Salmos 7:2

Señor, Dios mío, tú eres mi refugio, sálvame de mis perseguidores, sálvame;

Proverbios 30:22

un esclavo que llega a ser rey, un fatuo que tiene pan en abundancia,

Isaías 43:13

desde la eternidad lo soy; nadie se puede librar de mi mano, yo actúo sin que nadie lo impida.

Oseas 2:10

No reconoció que era yo quien le daba el trigo, el vino y el aceite; quien prodigaba la plata y el oro que ellos emplearon para los baales.

Zacarías 11:6

Pues no volveré yo a tener compasión de los habitantes de la tierra, palabra del Señor. Voy a entregar a cada hombre en manos de su prójimo y en manos de su rey. Ellos devastarán la tierra, y yo no los libraré de sus manos.

Deuteronomio 28:43

El extranjero que vive en tu tierra subirá cada vez más, y tú bajarás cada día más;