Job 38:12 - Biblia Martin Nieto

¹² ¿Has mandado en tu vida a la mañana, has asignado a la aurora su lugar,

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹² ¿Has mandado tú a la mañana en tus días? ¿Has mostrado al alba su lugar,

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹² »¿Alguna vez has ordenado que aparezca la mañana o has causado que el amanecer se levante por el oriente?

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹² ¿Has mandado una vez en tu vida a la mañana o indicado a la aurora su lugar,

La Biblia Textual 3a Edicion

¹² ¿Has dado orden en tu vida al mañana,° Para que enseñe a la aurora su lugar,

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹² ¿Has mandado, en tu vida, a la mañana? ¿Has señalado a la aurora su puesto,

Job 38:12 Referans Kwoze

Génesis 1:5

y llamó a la luz día, y a las tinieblas noche. Hubo así tarde y mañana: día primero.

Job 15:7

¿Naciste tú el primero de los hombres? ¿Viste la luz antes que las colinas?

Job 24:16

Por la noche perforan las casas que de día se habían señalado los que no quieren saber nada de la luz.

Job 38:11

y le dije: 'No pasarás de aquí, aquí se romperá la soberbia de tus olas'?

Job 38:13

para que aferre a la tierra por sus bordes y de ella expulse a los malvados?

Job 38:21

¡Tienes que saberlo, porque ya habías nacido y es tan grande la cuenta de tus días!

Job 38:4

¿Dónde estabas tú cuando fundaba yo la tierra? ¡Habla, si es que sabes tanto!

Job 8:9

pues nosotros somos de ayer y nada sabemos; una sombra son nuestros días en la tierra.

Salmos 74:16

Tuyo es el día, tuya también la noche, tú la luna y el sol estableciste,

Amós 5:8

Él ha hecho las Pléyades y el Orión, cambia en aurora las tinieblas y el día lo oscurece en noche; él llama a las aguas del mar y las vierte sobre la superficie de la tierra; su nombre es el Señor.

Lucas 1:78

gracias a la bondad misericordiosa de nuestro Dios, / por la que nos visitará / como el sol que nace de lo alto, /

2 Pedro 1:19

con lo cual nos confirmamos más aún en la palabra de los profetas. Por tanto, vosotros mismos hacéis bien en poner en ella vuestra atención, como en lámpara que luce en lugar tenebroso hasta que alboree el día y el lucero de la mañana despunte en vuestros corazones.