Isaías 37:1 - Biblia Martin Nieto

¹ Al oírlos, el rey Ezequías se rasgó las vestiduras, se vistió de saco y entró en el templo del Señor.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹ Aconteció, pues, que cuando el rey Ezequías oyó esto, rasgó sus vestidos, y cubierto de cilicio vino a la casa de Jehová.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹ Cuando el rey Ezequías oyó el informe, rasgó su ropa, se vistió de tela áspera y entró al templo del Señor.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹ Cuando terminaron de hablar, el rey Ezequías rasgó también su ropa, se puso un saco y se fue a la Casa de Yavé.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹ Y sucedió que cuando el rey Ezequías lo oyó, también rasgó sus vestidos, y se cubrió de saco, y fue a la Casa de YHVH.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹ El rey Ezequías, al oírlo, rasgó sus vestiduras y, cubierto de saco, entró en el templo de Yahveh.

Isaías 37:1 Referans Kwoze

2 Reyes 22:11

Cuando el rey oyó las palabras del libro de la ley, rasgó sus vestiduras

2 Crónicas 32:20

El rey Ezequías y el profeta Isaías, hijo de Amós, oraron y clamaron al cielo.

Esdras 9:5

A la hora del sacrificio de la tarde salí de mi abatimiento y, con los vestidos y el manto rasgados, me postré de rodillas, extendí mis manos hacia el Señor, mi Dios,

Ester 4:1

Apenas supo Mardoqueo lo que se había hecho, rasgó sus vestiduras, se vistió de saco y ceniza y salió por la ciudad lanzando gritos de dolor: '¡Un pueblo inocente va a ser exterminado!'.

Isaías 22:12

Aquel día el Señor Dios omnipotente os invitaba a tonsuraros y a vestiros de saco.

Isaías 36:22

Y el mayordomo del palacio, Eliaquín, hijo de Jelcías, el secretario Sebná y el heraldo Yoaj, hijo de Asaf, volvieron, rasgados los vestidos, donde Ezequías y le dieron cuenta de las palabras del general.

Isaías 37:14

Ezequías tomó la carta de mano de los mensajeros y, después de haberla leído, subió al templo del Señor y la desplegó ante el Señor.

Jeremías 26:19

¿Acaso por eso le condenaron a muerte Ezequías, rey de Judá, y todo Judá? ¿No temieron más bien al Señor; no imploraron su gracia, hasta obtener que retirara la desgracia con que les había amenazado? ¿Y vamos nosotros a cargar con un delito tan grave?'.

Jeremías 36:24

Pero no se espantaron ni se rasgaron las vestiduras el rey ni ninguno de sus servidores al oír estas palabras;

Mateo 11:21

'¡Ay de ti, Corozaín! ¡Ay de ti, Betsaida!, porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que en vosotras, haría ya tiempo que se hubieran arrepentido cubiertas de saco y ceniza.