Isaías 19:5 - Biblia Martin Nieto

⁵ Se evaporarán las aguas del mar; el río quedará seco, sin agua;

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁵ Y las aguas del mar faltarán, y el río se agotará y secará.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁵ Las aguas del Nilo no subirán para inundar los campos; el lecho del río estará totalmente seco.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁵ Desaparecerá el agua del mar, su río no correrá y quedará seco;'

La Biblia Textual 3a Edicion

⁵ Las aguas del Nilo se secarán, El río quedará seco y árido;

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁵ Se secarán las aguas del mar, el río se agotará y se resecará;

Isaías 19:5 Referans Kwoze

Job 14:11

Podrán agotarse las aguas de los mares, secarse los ríos y desaparecer;

Isaías 15:6

Las aguas de Nimrín son yermo desolado: se ha secado la hierba, se ha marchitado el verde, ya no hay verdor.

Isaías 23:11

El Señor ha extendido su mano sobre el mar para aplastar sus reinos; ha dado órdenes sobre Canaán de destruir sus fortalezas.

Isaías 37:25

Yo mismo he excavado y he bebido aguas extranjeras; he secado con las plantas de mis pies todos los Nilos de Egipto.

Isaías 50:2

¿Por qué, cuando vine, no encontré a nadie, y cuando llamé, nadie respondió? ¿Sería acaso mi brazo demasiado corto para libertar o me faltaría fuerza para salvar? Con una amenaza seco yo el mar, convierto los ríos en desierto; y sus peces, por falta de agua, se amustian y mueren de sed.

Jeremías 51:36

Por eso, esto dice el Señor: Mira, yo tomo en mis manos tu causa y ejecutaré por ti la venganza. Haré que se seque su río y agotaré sus fuentes.

Ezequiel 30:12

Dejaré secos sus Nilos, abandonaré el país en manos de asesinos, devastaré la tierra y cuanto encierra por mano de extranjeros. Yo, el Señor, he hablado.

Zacarías 10:11

Atravesarán el mar de Egipto -él herirá las olas del mar-, se secarán las profundidades del Nilo. El orgullo de Asiria será humillado, y el cetro de Egipto será quitado.

Zacarías 14:18

Y si la familia de Egipto no quiere venir, también sobre ella vendrá la plaga con la que el Señor castigará a las naciones que no vayan a celebrar la fiesta de los tabernáculos.