3 Él, en efecto, ha sido considerado digno de una gloria superior a la de Moisés, en la misma medida en que la dignidad del arquitecto de una casa supera a la casa misma.
3 Porque él ha sido considerado tanto más digno de una gloria superior a la de Moisés cuanto mayor es el honor del constructor de una casa que la casa misma.
Zorobabel puso los cimientos en esta casa, y él mismo terminará la obra. Entonces reconoceréis que el Señor me ha enviado a vosotros. Porque los que no hacían caso en los primeros días se alegrarán y verán la plomada en manos de Zorobabel'. Estos siete son los ojos del Señor que recorren toda la tierra.
Y si el ministerio de muerte, grabado en letras sobre piedras, fue glorioso hasta el punto que los israelitas no podían mirar fijamente al rostro de Moisés a causa del resplandor, que era pasajero,
Pero al que fue rebajado un poco con relación a los ángeles, Jesús, le vemos coronado de gloria y dignidad por haber sufrido la muerte; de modo que, por la gracia de Dios, gustó la muerte en beneficio de todos.
Cristo, por el contrario, lo ha sido en calidad de Hijo, al frente de su casa. Y su casa somos nosotros, con tal que permanezcamos inquebrantables hasta el fin, confesando valientemente nuestra fe y confiados en la esperanza que tenemos.