Proverbios 15:6 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

⁶ A la familia del hombre honrado nunca le falta nada; al malvado sus ganancias le traen grandes problemas.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁶ En la casa del justo hay gran provisión; Pero turbación en las ganancias del impío.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁶ En la casa del justo hay tesoros, pero las ganancias del perverso le acarrean dificultades.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁶ Hay muchas riquezas en la casa del justo, y muchos problemas con las ganancias del malo.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁶ En la casa del justo hay muchos bienes, Pero en las ganancias del malvado, desbarajuste.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁶ En la casa del justo reina la abundancia, las ganancias del malvado son destruidas.

Proverbios 15:6 Referans Kwoze

Salmos 112:3

Tendrán en su casa muchas riquezas, y siempre triunfarán en todo.

Salmos 37:16

Más vale un pobre honrado que muchos ricos malvados.

Proverbios 10:22

La bendición de Dios es riqueza que viene libre de preocupaciones.

Proverbios 13:22

Las riquezas del hombre bueno serán para sus nietos; las riquezas del pecador serán la herencia de la gente honrada.

Proverbios 15:16

Más vale ser pobre y obedecer a Dios que ser rico y vivir en problemas.

Proverbios 15:5

El que es tonto no acepta que su padre lo corrija, pero el que es sabio acepta la corrección.

Proverbios 15:7

Cuando los sabios hablan, comparten su conocimiento; ¡los ignorantes no hacen esto ni con el pensamiento!

Proverbios 16:8

Más vale ser pobre pero honrado, que ser rico pero tramposo.

Proverbios 21:20

En casa del sabio hay riquezas y perfumes; en casa del tonto solo hay desperdicios.

Proverbios 3:33

Dios bendice el hogar del hombre honrado, pero maldice la casa del malvado.

Proverbios 8:21

y lleno de riquezas a todos los que me aman.

Eclesiastés 4:6

pero «más vale una hora de descanso que dos horas de trabajo», pues el mucho trabajo no sirve de nada.

Hebreos 11:26

En vez de disfrutar de las riquezas de Egipto, Moisés decidió que era mejor sufrir, como también iba a sufrir el Mesías, pues sabía que Dios le daría su premio.