25 Ni de mano de extranjeros tomarás estos animales para ofrecerlos como el pan de vuestro Dios, porque su corrupción está en ellos; hay en ellos defecto, no se os aceptarán.
25 y no deberás aceptar animales así de los extranjeros y luego ofrecerlos como sacrificio a tu Dios. Dichos animales no serán aceptados a tu favor, porque están mutilados o tienen defectos».
25 ni tampoco recibirán de mano de extranjeros alguna de estas víctimas para ofrecerla como alimento del Dios de ustedes, porque dicha mutilación es un defecto, y con esto no será aceptada.
25 Ni aun por mano de extranjeros permitiréis que esos animales sean aproximados como pan de vuestro Dios, porque son deformes y tienen defecto. No os serán aceptados.
25 Y no permitiréis que tales víctimas sean ofrecidas de mano de un extranjero como alimento de vuestro Dios, pues su deformidad es un defecto y son, por tanto, inaceptables'.
No le dan ninguna importancia a mi templo; al contrario, dejan entrar en él a extranjeros, que ni en su cuerpo ni en su mente llevan la señal de mi pacto. Dejan en manos de esa gente el culto en el templo, que es algo muy especial y que a ustedes les corresponde hacer. Además, ustedes me faltan al respeto, pues me presentan grasa y sangre como ofrenda. Con esos actos repugnantes, ustedes faltan a mi pacto.
Ustedes están consagrados a mi servicio, así que deben obedecerme siempre. Deberán ser diferentes, porque ustedes presentan el pan y las ofrendas que se queman en mi honor.
»Deben apartarse de todo lo malo, porque ustedes son quienes me presentan el pan dedicado en mi honor. Deben ser diferentes, porque yo soy un Dios diferente. Soy el Dios de Israel, y a ustedes los he hecho diferentes.