Job 10:3 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

³ Tú eres mi creador, y no está bien que me maltrates ni que permitas que los malvados hagan planes contra mí.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

³ ¿Te parece bien que oprimas, Que deseches la obra de tus manos, Y que favorezcas los designios de los impíos?

Biblia Nueva Traducción Viviente

³ ¿Qué ganas con oprimirme? ¿Por qué me rechazas, siendo yo obra de tus manos, mientras miras con favor los planes de los malvados?

Biblia Católica (Latinoamericana)

³ ¿Acaso te conviene mostrarte duro, despreciar la obra de tus manos y justificar las teorías de los malvados?

La Biblia Textual 3a Edicion

³ ¿Es justo para ti oprimir, Desechar la obra de tus manos, Y favorecer el designio de los malos?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

³ ¿Qué logras con ser violento, con despreciar la obra de tus manos y favorecer los planes del impío?

Job 10:3 Referans Kwoze

Job 10:8

”Tú, con tus propias manos, me fuiste dando forma, como quien hace una olla de barro, como quien derrama crema para hacer queso; ¿por qué quieres quitarme la vida y hacerme volver al polvo?

Job 16:11

Dios me dejó caer en manos de gente malvada.

Job 19:6

Pero voy a decirles algo: es Dios quien me hizo daño, ¡es Dios quien me tendió una trampa!

Job 21:16

Se creen dueños de su felicidad, pero yo no pienso como ellos.

Job 27:2

«Dios me tiene amargado y no quiere hacerme justicia, pero juro en su nombre

Job 30:21

Eres muy cruel conmigo; me golpeas con tu brazo poderoso,

Job 31:15

¡Tanto a ellos como a mí Dios nos hizo iguales!

Job 33:4

El Dios todopoderoso me hizo, y con su espíritu me dio vida.

Job 40:8

»¿Tienes que acusarme de injusto para probar que eres inocente?

Job 8:20

»Dios acepta al honrado, y rechaza al malvado.

Job 9:22

En todo caso, da lo mismo. Por eso puedo afirmar que Dios destruye por igual a los buenos y a los malos.

Job 9:24

Cuando algún malvado se apodera de un terreno, es Dios mismo quien les tapa los ojos a los jueces.

Salmos 100:3

Reconozcan que él es Dios; él nos hizo, y somos suyos. Nosotros somos su pueblo: ¡él es nuestro pastor, y nosotros somos su rebaño!

Salmos 138:8

Dios mío, tú cumplirás en mí todo lo que has pensado hacer. Tu amor por mí no cambia, pues tú mismo me hiciste. ¡No me abandones!

Salmos 69:33

33 (34) Tú, Dios mío, atiendes a los pobres; ¡no te olvidas de tu pueblo que se encuentra cautivo!

Isaías 64:8

»Dios, tú eres nuestro padre; nosotros somos el barro y tú eres el alfarero: ¡tú eres nuestro creador!

1 Pedro 4:19

Por eso, los que sufren porque Dios así lo quiere, deben seguir haciendo el bien y dejar que Dios los cuide, pues él es su creador y cumple lo que promete.