Génesis 48:9 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

^9-10 José le respondió: —Son los hijos que Dios me ha dado aquí en Egipto. Como Jacob ya no podía ver bien por causa de su edad, le pidió a José: —Acércamelos. Voy a bendecirlos. José los acercó a su padre, y él los besó y los abrazó.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁹ Y respondió José a su padre: Son mis hijos, que Dios me ha dado aquí. Y él dijo: Acércalos ahora a mí, y los bendeciré.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁹ —Sí —le dijo José—, estos son los hijos que Dios me ha dado aquí en Egipto. Y Jacob dijo: —Acércalos más a mí, para que pueda bendecirlos.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁹ José le respondió: 'Estos son mis hijos, los que Dios me ha dado aquí. Y le dijo: 'Acércalos, por favor, y los bendeciré.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁹ Y José respondió a su padre: Son mis hijos, que ’Elohim me dio aquí. Le dijo: Acércamelos para que los bendiga.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁹ Respondió José a su padre: 'Son mis hijos; los que me ha dado Dios aquí'. Y le dijo: 'Acércamelos para que los bendiga'.

Génesis 48:9 Referans Kwoze

Génesis 27:4

Prepárame luego un buen plato de comida, como a mí me gusta, y tráemelo para que me lo coma. Así, antes de mi muerte te daré mi bendición.

Génesis 30:2

Jacob se enojó con ella, y le dijo: —¿Acaso crees que yo soy Dios? ¡Él es quien no te deja tener hijos!

Génesis 33:5

Luego, al ver Esaú a las mujeres y a los niños, preguntó: —¿Quiénes son todos estos? Jacob le contestó: —Dios ha sido bueno conmigo y me ha dado todos estos hijos.

Génesis 49:28

Así bendijo Jacob a sus doce hijos. A cada una de las doce tribus de Israel le dio la bendición más apropiada.

Salmos 127:3

Los hijos que tenemos son un regalo de Dios. Los hijos que nos nacen son nuestra recompensa.

Isaías 8:18

Dios vive en el monte Sión, y él me ha dado hijos para que juntos sirvamos de advertencia a su pueblo.

Deuteronomio 33:1

Moisés fue un gran profeta al servicio de Dios. Poco antes de morir, bendijo a los israelitas

Hebreos 11:21

Jacob confió en Dios y, por eso, cuando ya estaba por morir, les prometió a los hijos de José que Dios los iba a bendecir. Luego, se apoyó en la punta de su bastón y adoró a Dios.

1 Samuel 1:20

que ella quedara embarazada. Cuando nació el niño, Ana le puso por nombre Samuel, porque Dios contestó su oración.

1 Samuel 1:27

Yo le pedí este niño, y él me lo concedió.