Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





1 Tesalonicenses 3:8 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

8 Ahora que sabemos esto, sentimos nuevas fuerzas para seguir viviendo.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

8 porque ahora vivimos, si vosotros estáis firmes en el Señor.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Nos reaviva saber que están firmes en el Señor.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 si están firmes en el Señor, nosotros volvemos a vivir.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

8 pues ahora vivimos,° puesto que vosotros estáis firmes en el Señor.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 pues al conocer vuestra firmeza en el Señor, ahora sí que nos sentimos vivos.

Gade chapit la Kopi




1 Tesalonicenses 3:8
24 Referans Kwoze  

5 (6) Cuando Dios se enoja, el enojo pronto se le pasa; pero cuando ama, su amor dura toda la vida. Tal vez lloremos por la noche, pero en la mañana estaremos felices.


»Si ustedes se mantienen unidos a mí, yo me mantendré unido a ustedes. Ya saben que una rama no puede producir uvas si no se mantiene unida a la planta. Del mismo modo, ustedes no podrán hacer nada si no se mantienen unidos a mí.


»Si ustedes se mantienen unidos a mí y obedecen todo lo que les he enseñado, recibirán de mi Padre todo lo que pidan.


Jesús les dijo a los judíos que habían creído en él: —Si ustedes obedecen mis enseñanzas, serán verdaderamente mis discípulos;


Bernabé era un hombre bueno, que tenía el poder del Espíritu Santo y confiaba solamente en el Señor. Cuando Bernabé llegó y vio que Dios había bendecido a toda esa gente, se alegró mucho y los animó para que siguieran siendo fieles y obedientes al Señor. Y fueron muchos los que escucharon a Bernabé y obedecieron el mensaje de Dios.


Por eso, mis queridos hermanos, manténganse firmes, y nunca dejen de trabajar más y más por el Señor Jesús. Y sepan que nada de lo que hacen para Dios es inútil.


Manténganse siempre en estado de alerta, pero confiando en Cristo. Sean fuertes y valientes,


¡Jesucristo nos ha hecho libres! ¡Él nos ha hecho libres de verdad! Así que no abandonen esa libertad, ni vuelvan nunca a ser esclavos de la ley.


También le pido a Dios que Jesucristo viva en sus corazones, gracias a la confianza que tienen en él, y que ustedes se mantengan firmes en su amor por Dios y por los demás.


Si vivo, quiero hacerlo para servir a Cristo, pero si muero, salgo ganando.


Solo les pido que vivan dignamente, como lo enseña la buena noticia de Cristo. Porque, sea que yo vaya o no a verlos, quiero estar seguro de que todos ustedes viven muy unidos y que se ponen de acuerdo en todo, y que luchan unidos por anunciar la buena noticia.


Queridos hermanos y amigos, estoy muy contento y orgulloso de ustedes. ¡Realmente los extraño! ¡No dejen de confiar en el Señor Jesús!


Pero esto será así, solo si mantienen su confianza en Cristo y siguen creyendo en lo que nos promete el mensaje de la buena noticia. Este mensaje ha sido anunciado por todo el Imperio Romano, y yo colaboro anunciándolo.


Hermanos, a pesar de todos nuestros problemas y sufrimientos, nos alegra saber que siguen confiando en el Señor Jesús.


Sigamos confiando en que Dios nos salvará. No lo dudemos ni un instante, porque él cumplirá lo que prometió.


Al principio, cuando confiamos en Cristo, nos hicimos compañeros suyos; y si no dejamos de confiar en él, seguiremos siendo sus compañeros siempre.


Jesús es el Hijo de Dios, y es nuestro gran Jefe de sacerdotes, que ha subido al cielo. Por eso debemos seguir confiando en él.


Pero después de que ustedes hayan sufrido por un poco de tiempo, Dios hará que todo vuelva a estar bien y que ustedes nunca dejen de confiar en él; les dará fuerzas para que no se desanimen, y hará que siempre estén seguros de lo que creen. Recuerden que Dios nos ha elegido por medio de Jesucristo, para que formemos parte de su maravilloso reino.


Queridos amigos, con esto quedan advertidos. Así que cuídense mucho, no sea que los engañe la gente malvada y ustedes dejen de creer firmemente en Dios.


Pronto regresaré. Sigue creyendo fielmente en mí, y así nadie te quitará tu premio.


Acuérdate de todo lo que has aprendido acerca de Dios, y vuelve a obedecerlo. Arrepiéntete. Si no lo haces, iré a castigarte cuando menos lo esperes; llegaré a ti como el ladrón, que nunca sabes cuándo llegará a robar.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite