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Oseas 2:4 - Biblia Torres Amat 1825

4 No tendré compasión de sus hijos, porque son hijos de fornicación.

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Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

4 Ni tendré misericordia de sus hijos, porque son hijos de prostitución.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

4 No amaré a sus hijos porque fueron concebidos en la prostitución.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

4 ¡Acusen a su madre, acúsenla, porque ella ya no es mi esposa ni yo soy su marido! Que se limpie de la infidelidad grabada en su rostro y tire afuera la impureza que se apegó a sus pechos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

4 Y no me compadezca de sus hijos, porque son hijos bastardos.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

4 Litigad con vuestra madre, litigad, porque ella no es mi mujer ni yo soy su marido. Que se quite del rostro las señales de su prostitución y de los pechos las señales de sus adulterios;

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Oseas 2:4
17 Referans Kwoze  

Apenas vio Joram a Jehú, dijo: ¿Tenemos paz, Jehú? ¿Qué paz puede haber, le respondió, mientras permanecen aún en su vigor las fornicaciones o idolatrías de tu madre Jezabel, y sus muchas hechicerías?


Y aquel día el Señor hará sentir su azote desde el cauce del río Eufrates hasta el torrente de Egipto, o Nilo; y vosotros, oh hijos de Israel, seréis congregados uno a uno.


Esto dice el Señor: ¿Qué libelo de repudio es ése, con el cual he desechado a vuestra madre? ¿O quién es ese acreedor mío, a quien os he yo vendido? Tened entendido que por vuestras maldades habéis sido vendidos, y que por vuestros crímenes he repudiado yo a vuestra madre.


Entretanto llegaos vosotros, moradores de Jerusalén , hijos de una agorera, raza de padre adúltero y de mujer prostituta.


y los desparramaré entre las naciones, dice el Señor, separando el hermano de su hermano, y los padres de sus hijos; no perdonaré, ni me aplacaré, ni me moveré a compasión para dejar de destruirlos.


Porque esto dice el Señor: No entrarás tú en la casa del convite mortuorio, y no vayas a dar el pésame, ni a consolar; porque yo, dice el Señor, he desterrado de este pueblo mi paz, mi misericordia y mis piedades.


Con esto tomaré yo venganza en ti de mi amor ofendido; la cual ejecutarán ellos sin misericordia: Te cortarán ignominiosamente la nariz y orejas, y el resto lo destrozarán con la espada; se llevarán cautivos a tus hijos e hijas; y cuanto quedare de ti lo consumirá el fuego.


Ahora, pues, yo también los trataré con rigor, no se enternecerán mis ojos, ni usaré de misericordia; y por más que levantaren el grito para que los oiga, yo no los escucharé.


Ahora, pues, tampoco miraré con compasión, ni usaré de piedad; los trataré como ellos merecen.


El Señor comenzó a hablar a Oseas, y le dijo: Anda, cásate con una mujer ramera, y ten hijos de ramera; porque la tierra de Israel no ha de cesar de fornicar o idolatrar contra el Señor.


Concibió de nuevo Gomer y parió una hija. Y le dijo el Señor a Oseas: Ponle por nombre: No más misericordia ; porque yo no usaré ya en adelante de misericordia alguna con los de la casa de Israel; sino que a todos los echaré en un profundo olvido.


Han sido infieles al Señor, pues han engendrado hijos bastardos, ahora en un mes serán consumidos con todo cuanto poseen.


A lo que replicó el ángel del Señor, y dijo: ¡Oh Señor de los ejércitos!, ¿hasta cuándo no te apiadarás de Jerusalén y de las ciudades de Judá, contra las cuales estás enojado? Este es ya el año septuagésimo.


Vosotros hacéis lo que hizo vuestro padre. Ellos le replicaron: Nosotros no somos de raza de fornicadores, o idólatras, un solo padre tenemos, que es Dios.


Considera, pues, la bondad y la severidad de Dios, la severidad para con aquellos que cayeron, y la bondad de Dios para contigo, si perseverares en el estado en que su bondad te ha puesto; de lo contrario, tú también serás cortado.


De donde se sigue que con quien quiere usa de misericordia, y endurece o abandona en su pecado al que quiere.


¿De qué servirá, hermanos míos, el que uno diga tener fe, si no tiene obras? ¿Por ventura la fe podrá salvarle?


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