Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Levítico 14:34 - Biblia Torres Amat 1825

34 Cuando hubiereis entrado en la tierra de Canaán, cuya posesión os daré yo, si la plaga de la lepra hubiese infestado una casa,

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

34 Cuando hayáis entrado en la tierra de Canaán, la cual yo os doy en posesión, si pusiere yo plaga de lepra en alguna casa de la tierra de vuestra posesión,

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

34 «Cuando lleguen a Canaán, la tierra que les doy como posesión, puede que yo contamine con moho algunas de las casas de su tierra.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

34 Cuando hayan entrado en la tierra de Canaán que yo les daré en posesión, si yo castigo con la lepra alguna de las casas de la tierra que van a poseer,

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

34 Cuando entréis en la tierra de Canaán, la cual Yo os doy en propiedad, y Yo ponga una llaga de lepra en alguna casa de la tierra de vuestra propiedad,

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

34 'Cuando hayáis entrado en la tierra de Canaán que os he de dar en propiedad, si yo mando manchas de lepra a una casa del país que poseeréis,

Gade chapit la Kopi




Levítico 14:34
28 Referans Kwoze  

Y apareció el Señor a Abram, y le dijo: Esta tierra la daré a tu descendencia. Y él edificó allí mismo un altar al Señor, que se le había aparecido.


Levántate, y ve recorriendo ese país a lo largo y a lo ancho porque a ti he de dártelo.


A este fin te daré a ti y a tus descendientes la tierra en que estás ahora como peregrino, toda la tierra de Canaán en posesión perpetua y seré el Dios de ellos.


y dijo: Si escuchares la voz del Señor Dios tuyo, e hicieres lo que es recto, delante de él, y obedecieres sus mandamientos, y observares todos sus preceptos, no descargaré sobre ti plaga ninguna, de las que he descargado sobre Egipto; porque Yo soy el Señor que te doy la salud.


El Señor introduce la miseria en la casa del impío; pero echará sus bendiciones sobre las casas de los justos.


¡Oh cielos!, derramad desde arriba vuestro rocío; y lluevan las nubes al Justo, ábrase la tierra, y brote al Salvador , y nazca con él la justicia. Yo el Señor lo creé.


Habló todavía el Señor a Moisés y Aarón, diciendo:


sobre la lepra de los vestidos y de las casas,


Mas a vosotros digo: Entrad en posesión de su tierra, la cual yo os daré por herencia, tierra que mana leche y miel. Yo el Señor Dios vuestro, que os he separado de todos los demás pueblos.


Habla a los hijos de Israel, y diles: Cuando hubiereis entrado en la tierra que os daré y segado las mieses, ofreceréis al sacerdote manojos de vuestras espigas, primicias de vuestra siega,


Habla a los hijos de Israel, y diles: Entrado que hayáis en la tierra que yo os daré, dejadla descansar un año de siete en siete a honra del Señor.


¿Sonará la trompeta de guerra en una ciudad, sin que la población se conmueva? ¿Descargará alguna calamidad sobre la ciudad, que no sea por disposición del Señor?


Porque he aquí que el Señor lo ha decretado, y él castigará la casa grande con la total ruina, y la casa menor con grandes calamidades.


Resuena la voz del Señor en la ciudad, y aquellos que temen, ¡oh Dios!, tu santo Nombre, se salvarán. Escuchad vosotras, ¡oh tribus!; pero ¿y quién será el que obedezca?


Yo los sacaré fuera, dice el Señor de los ejércitos, y caerá encima de la casa del ladrón, y del que jura falsamente en medio de sus casas, y las consumirá con sus maderos y piedras.


y se le sujete todo el país: entonces seréis inculpables para con el Señor y delante de Israel; y obtendréis las regiones que deseáis con el beneplácito del Señor.


Guiados por el Señor, pasaremos armados a la tierra de Canaán, y confesamos públicamente haber ya recibido nuestra posesión en este lado del Jordán.


Habla con los hijos de Israel, y diles: Cuando hubiereis pasado el Jordán y estuviereis en la tierra de Canaán,


Estos son los preceptos y ordenanzas que debéis observar en la tierra que os ha de dar el Señor Dios de vuestros padres, para que la poseáis todos los días de vuestra vida.


Cuando el Señor Dios tuyo hubiere destruido las naciones, cuya tierra te ha de dar, y tú la poseyeres, y habitares en sus ciudades y casas,


Cuando hubieres entrado en la tierra cuya posesión te dará el Señor Dios tuyo, y la hayas obtenido, y habitares ya en ella,


a fin de poder escribir en ellas todas las palabras de esta ley, pasado que hayas el Jordán para entrar en la tierra que te dará el Señor Dios tuyo, tierra que mana leche y miel, conforme lo tiene jurado a tus padres.


Sube a esa montaña de Abarim, esto es, de los pasajes, al monte o colina de Nebo, que está en el país de Moab, enfrente de Jericó ; y contemplarás la tierra de Canaán, cuya posesión yo entregaré a los hijos de Israel. Y después morirás en el monte,


Desterrará de ti el Señor toda dolencia; y aquellas enfermedades o plagas pésimas de Egipto, que tú sabes, no te las enviará a ti sino a todos tus enemigos.


Era Josué anciano y de edad avanzada, cuando el Señor le dijo: Tú estás viejo, y tienes ya muchos años; y queda por conquistar y dividir en suertes una tierra dilatadísima.


Porque el Señor es el que da la muerte y da la vida; el que conduce al sepulcro y libra de él.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite