Jueces 19:19 - Biblia Torres Amat 1825

¹⁹ Aunque tenemos paja y heno para las bestias, pan y vino para el gasto mío, y de mi mujer, tu sierva, y del criado que viene con nosotros, nada nos falta sino posada.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁹ Nosotros tenemos paja y forraje para nuestros asnos, y también tenemos pan y vino para mí y para tu sierva, y para el criado que está con tu siervo; no nos hace falta nada.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁹ aunque traemos todo lo que necesitamos. Tenemos paja y forraje para nuestros burros, y bastante pan y vino para nosotros.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁹ Tengo sin embargo paja y forraje para nuestros burros, pan y vino para mí, para mi mujer y para mi sirviente. No nos falta nada'.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁹ Tenemos paja y forraje para nuestros asnos, así como pan y vino para mí y para tu sierva y para el criado que va con tu siervo. Nada nos hace falta.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁹ Tenemos paja y forraje para nuestros asnos; y también pan y vino para mí, para tu sierva y para el criado que acompaña a tu siervo; no nos falta de nada'.

Jueces 19:19 Referans Kwoze

Génesis 24:25

Y añadió: De paja y forraje hay en casa provisión abundante, y mucha capacidad para hospedaje.

Éxodo 5:7

De ninguna manera habéis ya de dar al pueblo, como antes, paja para que haga los ladrillos: que vayan ellos mismos a recogerla;

Hechos 10:23

Pedro entonces, haciéndolos entrar, los hospedó consigo. Al día siguiente partió con ellos, acompañándole también algunos de los hermanos de Jope.

Hechos 16:15

Habiendo, pues, sido bautizada ella y su familia, nos hizo esta súplica: Si es que me tenéis por fiel al Señor, venid, y hospedaos en mi casa. Y nos obligó a ello.

Jueces 19:11

Ya estaba cerca de Jebús, y se acababa el día: por lo que le dijo su criado: Ven por tu vida, torzamos el camino hacia la ciudad de los jebuseos, y paremos en ella.

Jueces 19:18

El cual le respondió: Venimos de Betlehem de Judá, y vamos a nuestra casa, que está al lado de la montaña de Efraín, de donde habíamos ido a Betlehem. Y ahora pasamos a la casa de Dios, y nadie nos quiere dar hospedaje.