Josué 17:6 - Biblia Torres Amat 1825

⁶ Porque las cinco hijas de Manasés poseyeron su herencia en medio de los hijos de esa tribu. Y la tierra de Galaad cupo en suerte a los otros hijos de Manasés.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁶ porque las hijas de Manasés tuvieron heredad entre sus hijos; y la tierra de Galaad fue de los otros hijos de Manasés.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁶ porque las descendientes de Manasés también recibieron una porción de tierra al igual que los descendientes varones. (La tierra de Galaad se les entregó a los otros descendientes varones de Manasés).

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁶ ya que las hijas de Manasés recibieron una posesión en medio de sus hijos. Galaad pertenecía a los otros hijos de Manasés.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁶ Porque aquellas hijas de Manasés obtuvieron herencia entre sus hijos, y la tierra de Galaad quedó para los otros hijos de Manasés.

Josué 17:6 Referans Kwoze

Ezequiel 48:4

Y desde los confines de Neftalí, de oriente al mar, la porción de Manasés.

Josué 13:29

Dio también Moisés a la media tribu de Manasés y a sus hijos la tierra que debía poseer, repartida entre sus familias.

Josué 13:30

La cual principiando en Manaim abraza todo Bazán, y todos los dominios de Og, rey de Basán, y todas las aldeas de Jair que pertenecen a Basán en número de sesenta poblaciones.

Josué 13:31

Y la mitad de Galaad, y Astarot, y Edrai, ciudades del reino de Og en Basán: todo esto fue dado a los hijos de Maquir, hijo de Manasés, esto es, a la mitad de los hijos de Maquir, según sus familias.

Josué 17:5

Así tocaron a Manasés diez porciones en la tierra de Canaán, sin contar la tierra de Galaad y de Basán, tras el Jordán.

Josué 17:7

Y fueron los términos de Manasés desde Aser y Macmetat, que mira a Siquem, extendiéndose a mano derecha al lado de los que habitan en Fuente de Tafúa.

Josué 22:7

Moisés había dado a la media tribu de Manasés su posesión en Basán; por eso a la otra mitad restante le dio Josué la herencia entre los demás hermanos suyos en este lado del Jordán, al poniente. En fin, al remitirlos a sus casas, después de bendecirlos,