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Jeremías 19:3 - Biblia Torres Amat 1825

3 Escuchad, les dirás, la palabra del Señor, ¡oh reyes de Judá y ciudadanos de Jerusalén ! Esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Sabed que yo descargaré sobre este lugar tales castigos, que a cualquiera que los oyere contar le retiñirán las orejas.

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Biblia Reina Valera 1960

3 Dirás, pues: Oíd palabra de Jehová, oh reyes de Judá, y moradores de Jerusalén. Así dice Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: He aquí que yo traigo mal sobre este lugar, tal que a todo el que lo oyere, le retiñan los oídos.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

3 Diles: “¡Reyes de Judá y ciudadanos de Jerusalén, escuchen este mensaje del Señor! Esto dice el Señor de los Ejércitos Celestiales, Dios de Israel: ‘¡Traeré un terrible desastre a este lugar, y a los que se enteren les zumbarán los oídos!

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Biblia Católica (Latinoamericana)

3 Comenzarás así: Escuchen la palabra de Yavé, reyes de Judá y habitantes de Jerusalén. Así dice Yavé de los Ejércitos, el Dios de Israel. Voy a mandar una calamidad tal sobre este lugar, que le zumbarán los oídos a quien la oiga,

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La Biblia Textual 3a Edicion

3 Di: ¡Oh reyes de Judá, y vosotros, habitantes de Jerusalem, oíd el oráculo de YHVH! Así dice YHVH Sebaot, Dios de Israel: He aquí Yo traigo un mal sobre este lugar, tal así, que a todo el que lo oiga le retiñirán los oídos.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

3 Dirás: escuchad la palabra de Yahveh, reyes de Judá y habitantes de Jerusalén. Así dice Yahveh Sebaot, Dios de Israel: mirad: voy a traer sobre este lugar una desgracia tal que a todo el que la oiga le retiñirán los oídos.

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Jeremías 19:3
18 Referans Kwoze  

Entonces, ¡oh Señor!, las naciones temerán tu santo Nombre, y todos los reyes de la tierra respetarán tu gloria.


El Señor está a tu diestra; en el día de su ira destrozó a los reyes.


Ahora pues, ¡oh reyes!, entendedlo: Sed instruidos vosotros los que juzgáis o gobernáis la tierra.


Porque el lecho es angosto en tal manera, que uno de los dos caerá; y tan pequeña la manta que no puede cubrir a ambos.


Di al rey y a la reina: Humillaos, sentaos en el suelo, poneos de luto, porque se os cae ya de la cabeza la corona de vuestra gloria.


y les dirás a todos: Oíd la palabra del Señor, ¡oh reyes de Judá!, y tú, pueblo todo de Judá, y todos vosotros ciudadanos de Jerusalén que entráis por estas puertas,


Tú, pues, ahora di a los varones de Judá y a los habitantes de Jerusalén : Esto dice el Señor: Mirad que yo estoy amasando estragos contra vosotros, y trazando designios en daño vuestro. Conviértase cada uno de vosotros de su mala vida, y enmendad vuestras costumbres e inclinaciones.


Esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Mirad, yo voy a traer sobre esta ciudad y sobre todas las ciudades que dependen de ella, todos los males con que yo la he amenazado; ya que han endurecido su cerviz para no atender a mis palabras.


¿Es bueno que yo he de comenzar el castigo por Jerusalén , la ciudad en que ha sido invocado mi Nombre; y vosotros, como si fueseis inocentes, habíais de quedar impunes? No quedaréis exentos de castigo, pues yo desenvaino mi espada contra todos los moradores de la tierra, dice el Señor de los ejércitos.


Por tanto, esto dice el Señor de los ejércitos, el Dios de Israel: Yo voy a descargar sobre Judá, y sobre todos los habitantes de Jerusalén , todas las tribulaciones con que les he amenazado; puesto que yo les he hablado, y no han querido escucharme; los he llamado, y no han querido responderme.


por causa de la maldad que ellos cometieron para provocar mi indignación, yéndose a ofrecer sacrificios, y adorar a dioses ajenos, desconocidos de ellos, de vosotros y de vuestros padres.


Oye, ¡oh tierra!, mira, yo acarrearé sobre ese pueblo desastres, fruto de sus depravados designios; puesto que no escucharon mis palabras, y desecharon mi ley.


Esto dice el Señor Dios: La aflicción única, la aflicción singularísima, he aquí que viene.


y por mi causa seréis conducidos ante los gobernadores y los reyes para dar testimonio de mí a ellos y a las naciones.


Al ángel de la iglesia de Sardis escríbele también: Esto dice el que tiene a su mandar los siete espíritus de Dios y las siete estrellas: Yo conozco tus obras y que tienes nombre de viviente, y estás muerto.


Y dijo el Señor a Samuel: Mira, yo voy a hacer una cosa en Israel, que a todo aquel que la oyere, le retiñirán de terror ambos oídos,


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