Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Hechos 9:8 - Biblia Torres Amat 1825

8 Se levantó Saulo de la tierra, y aunque tenía abiertos los ojos, nada veía. Por lo cual llevándole de la mano le metieron en Damasco.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

8 Entonces Saulo se levantó de tierra, y abriendo los ojos, no veía a nadie; así que, llevándole por la mano, le metieron en Damasco,

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Saulo se levantó del suelo, pero cuando abrió los ojos, estaba ciego. Entonces sus acompañantes lo llevaron de la mano hasta Damasco.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 y Saulo, al levantarse del suelo, no veía nada por más que abría los ojos. Lo tomaron de la mano y lo llevaron a Damasco.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Entonces Saulo se levantó del suelo, y abriendo sus ojos, nada° veía. Así que, llevándolo de la mano, lo introdujeron en Damasco.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Se levantó, pues, Saulo del suelo y aunque tenía los ojos abiertos nada veía; lo llevaron, pues, de la mano, hasta Damasco.

Gade chapit la Kopi




Hechos 9:8
10 Referans Kwoze  

Donde divididas las tropas, se echó sobre ellos de noche; y los desbarató, y los fue persiguiendo hasta Hoba, que está a la izquierda de Damasco.


Y a los de afuera, del menor hasta el mayor, hirieron de una especie de ceguera, que no pudieron atinar más con la puerta.


Le dijo a esto el Señor: ¿Quién hizo la boca del hombre? ¿O quién formó al mudo y al sordo, al que ve y al ciego? ¿No he sido yo?


Pues mira: Desde ahora la mano del Señor descargará sobre ti, y quedarás ciego sin ver la luz del día, hasta cierto tiempo. Y al momento densas tinieblas cayeron sobre sus ojos, y andaba buscando a tientas quien le diese la mano.


Y como el resplandor de aquella luz me hizo quedar ciego, los compañeros me condujeron por la mano hasta Damasco.


Al momento cayeron de sus ojos unas como escamas, y recobró la vista; y levantándose fue bautizado.


Aquí se mantuvo tres días privado de la vista, y sin comer ni beber.


Y aún no he dicho que estando en Damasco, el gobernador de la provincia por el rey Aretas, tenía puestas guardias a la ciudad para prenderme;


ni pasar a Jerusalén en busca de los apóstoles anteriores a mí; sino que me fui luego a la Arabia, de donde volví otra vez a Damasco.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite