Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Hebreos 13:9 - Biblia Torres Amat 1825

9 Tenemos un altar, o una víctima de que no pueden comer los que sirven al Tabernáculo.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

9 No os dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que se han ocupado de ellas.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

9 Así que no se dejen cautivar por ideas nuevas y extrañas. Su fortaleza espiritual proviene de la gracia de Dios y no depende de reglas sobre los alimentos, que de nada sirven a quienes las siguen.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

9 No se dejen engañar por las novedades y las doctrinas extrañas a la fe. La gracia de Dios es un buen medio para fortalecer la vida interior; no cuenten con otros alimentos de los que nadie sacó provecho.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

9 No seáis llevados por enseñanzas diversas y extrañas, pues mejor es que el corazón sea fortalecido con la gracia, no con régimen de alimentos, del que no sacaron ningún provecho los que lo observaban.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

9 No os dejéis extraviar por doctrinas complejas y extrañas, porque lo bueno es que el corazón se robustezca con la gracia, no con alimentos que nada aprovecharon a los que andaban en esas observancias.

Gade chapit la Kopi




Hebreos 13:9
35 Referans Kwoze  

Fortalecido está su corazón; no vacilará el justo; y mirará con desprecio a sus enemigos.


Porque aparecerán falsos Cristos y falsos profetas, y harán alarde de grandes maravillas y prodigios, de manera que aun los escogidos, si posible fuera, caerían en error:


A lo que Jesús les respondió: Mirad que nadie os engañe:


sino que el vino nuevo se debe echar en cueros nuevos, y así ambas cosas se conservan.


Y de entre vosotros mismos se levantarán hombres que sembrarán doctrinas perversas con el fin de atraerse a sí discípulos.


Y ahora, por último, os encomiendo a Dios, y a la palabra o promesa de su gracia, a aquel que puede acabar el edificio de vuestra salud, y haceros participar de su herencia con todos los santos.


Que no consiste el reino de Dios en comer, ni en beber esto o aquello, sino en la justicia, en la paz y en el gozo del Espíritu Santo.


Porque tal hay que tiene por lícito el comer de todo, mientras el débil no comerá sino legumbres, o verduras.


El que hace distinción de días, la hace para agradar al Señor. Y el que come de todo para agradar al Señor come, pues da gracias a Dios. Y el que se abstiene de ciertas viandas, por respeto al Señor lo hace; y así es que da gracias a Dios.


Las viandas son para el vientre, y el vientre para las viandas; mas Dios destruirá a aquél y a éstas; el cuerpo no es para la fornicación, sino para gloria del Señor, como el Señor para el cuerpo.


Lo cierto es que comer de tales viandas no es lo que nos hace recomendables a Dios. Pues ni porque comamos tendremos delante de él ventaja alguna; ni porque no comamos desmereceremos en nada.


Así, Dios es el que a nosotros junto con vosotros nos confirma en la fe de Cristo , y el que nos ha ungido con su unción.


Hermanos míos, si alguno, como hombre que es, cayere desgraciadamente en algún delito, vosotros los que sois espirituales, al tal amonestadle e instruidle con espíritu de mansedumbre, haciendo cada uno reflexión sobre sí mismo, y temiendo caer también en la tenta-ción.


de manera que ya no seamos niños fluctuantes, ni nos dejemos llevar aquí y allá de todos los vientos de opiniones humanas, por la malignidad de los hombres que engañan con astucia para introducir el error;


Nadie os engañe con palabras vanas; pues por tales cosas descargó la ira de Dios sobre los incrédulos.


Y digo esto, para que nadie os deslumbre con sus sutiles discursos.


Por último, hermanos, orad por nosotros, para que la palabra de Dios se propague más y más, sea glorificada en todo el mundo, como lo es ya entre vosotros,


No os dejéis seducir de nadie en ninguna manera; porque no vendrá este día sin que primero haya acontecido la apostasía, casi general de los fieles, y aparecido el hombre del pecado, el hijo de la perdición,


ciencia vana que profesándola algunos vinieron a perder la fe. La gracia sea contigo. Amén.


En esto se conoce el espíritu de Dios, todo espíritu, que confiesa que Jesucristo vino al mundo en carne verdadera, es de Dios;


olas bravas de la mar, que arrojan las espumas de sus torpezas; exhalaciones errantes, a quienes está reservada, o ha de seguir, una tenebrosísima tempestad que ha de durar para siempre.


Porque se han entrometido con disimulo ciertos hombres impíos (de quienes estaba ya muy de antemano predicho que vendrían a caer en este juicio o condenación), los cuales cambian la gracia de nuestro Dios en una desenfrenada licencia, y reniegan, o renuncian, a Jesucristo, nuestro único soberano y Señor.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite