Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Hebreos 12:5 - Biblia Torres Amat 1825

5 Porque el Señor al que ama, le castiga; y a cualquiera que recibe por hijo suyo, le azota y le prueba con adversidades.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

5 y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, Ni desmayes cuando eres reprendido por él;

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

5 ¿Acaso olvidaron las palabras de aliento con que Dios les habló a ustedes como a hijos? Él dijo: «Hijo mío, no tomes a la ligera la disciplina del Señor y no te des por vencido cuando te corrige.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

5 Tal vez hayan olvidado la palabra de consuelo que la sabiduría les dirige como a hijos: Hijo, no te pongas triste porque el Señor te corrige, no te desanimes cuando te reprenda;'

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

5 y habéis olvidado la exhortación que como a hijos se os habla, diciendo: Hijo mío, no tengas en poco la disciplina del Señor, Ni desmayes° cuando seas reprendido por Él.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 y habéis olvidado la exhortación que se os dirige como a hijos: Hijo mío, no desprecies la corrección del Señor ni te desanimes porque te reprenda.

Gade chapit la Kopi




Hebreos 12:5
33 Referans Kwoze  

Ahora, pues, ya que he hablado de Dios y en su defensa, no estorbaré que hables tú también lo que quieras.


Me ha castigado el Señor severamente; mas no me ha entregado a la muerte.


Tengo siempre mi alma en la mano, o en un hilo; pero yo no me olvidé de tu ley.


Me deleitaré en tus preceptos, y no me olvidaré de tus palabras.


Antes de ser yo humillado, pequé; mas ahora obedezco ya tu palabra.


He conocido, Señor, que tus juicios son justísimos; y conforme a tu verdad me has humillado.


Porque me he quedado seco y árido, como un odre expuesto a la escarcha; mas con todo, no me he olvidado de tus justísimos preceptos.


Bienaventurado el hombre a quien tú ¡oh Señor!, hayas instruido y amaestrado en tu ley,


Hijo mío, no te olvides de mi ley, y guarda en tu corazón mis mandamientos;


Procura adquirir la sabiduría, veas de alcanzar la prudencia, y no te olvides ni apartes las palabras de mi boca.


He escuchado con atención a Efraín, que en su cautiverio dice: Tú me has castigado, oh Señor; yo cual indómito novillo he sido corregido. Conviérteme a ti, y yo me convertiré; pues tú, ¡oh Señor!, eres mi Dios.


Pues ¿por qué se ha de quejar hombre viviente del castigo de sus pecados?


No está aquí, sino que resucitó; acordaos de lo que os previno, cuando estaba todavía en Galilea,


Ellas, en efecto, se acordaron de las palabras de Jesús .


Si bien cuando lo somos, el Señor nos castiga como a hijos con el fin de que no seamos condenados junto con este mundo.


No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque si perseveramos, a su tiempo recogeremos el fruto.


Recomiendo, pues, ante todas cosas que se hagan súplicas, oraciones, rogativas, acciones de gracias, por todos los hombres,


Que si estáis fuera de la corrección o castigo, de que todos los justos participaron, bien se ve que sois bastardos, y no hijos legítimos.


Sabed que nuestro hermano Timoteo está ya en libertad, con el cual iré a veros.


Ninguno cuando es tentado, diga que Dios le tienta; porque Dios no puede jamás dirigirnos al mal; y así él a ninguno tienta.


He aquí que estoy a la puerta de tu corazón, y llamo; si alguno escuchare mi voz y me abriere la puerta, entraré a él, y con él cenaré, y él conmigo.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite