Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





Esdras 9:6 - Biblia Torres Amat 1825

6 diciendo: Oh Dios mío, estoy lleno de confusión y me avergüenzo de levantar hacia ti mi rostro, porque nuestras maldades se han multiplicado sobre nuestra cabeza, y nuestros delitos han subido hasta el cielo

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

6 y dije: Dios mío, confuso y avergonzado estoy para levantar, oh Dios mío, mi rostro a ti, porque nuestras iniquidades se han multiplicado sobre nuestra cabeza, y nuestros delitos han crecido hasta el cielo.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 Hice la siguiente oración: «Oh Dios mío, estoy totalmente avergonzado; me da vergüenza elevar mi rostro a ti. Pues nuestros pecados se han amontonado tanto que son más altos que nosotros, y nuestra culpa llega a los cielos.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 y le dije: 'Estoy tan avergonzado y confundido que no me atrevo a levantar mi cara hacia ti, Dios mío. Nuestras faltas se han acumulado de tal forma que han sobrepasado nuestras cabezas, y nuestro pecado ha subido hasta el Cielo.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

6 y le dije: ¡Oh Dios mío, estoy confuso y avergonzado para elevar mi rostro ante ti, Dios mío, porque nuestras iniquidades se han multiplicado por encima de nuestra cabeza y nuestros delitos han crecido hasta los cielos!

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 y dije: '¡Dios mío! Me siento avergonzado y confuso al levantar, oh Dios mío, mi rostro hacia ti. Porque nuestras iniquidades se han multiplicado hasta por encima de nuestras cabezas, y nuestro pecado ha crecido hasta el cielo.

Gade chapit la Kopi




Esdras 9:6
27 Referans Kwoze  

Mas los sodomitas eran perversísimos, y muy grandes pecadores a los ojos de Dios.


y ellos en el lugar de su cautiverio se arrepintieren de corazón, y convertidos te pidieren perdón en medio de su esclavitud, diciendo: Hemos pecado, hemos procedido inicuamente, hemos hecho acciones impías;


Había allí en aquella sazón un profeta del Señor, llamado Oded, el cual, saliendo al encuentro del ejército que venía a Samaria, les dijo: Habéis visto que el Señor Dios de vuestros padres, irritado contra los hijos de Judá, los ha entregado en vuestras manos; mas vosotros les habéis quitado la vida atrozmente; tanto que vuestra crueldad ha subido hasta el cielo.


Y después de todos los desastres que han caído sobre nosotros por nuestras pésimas obras, y por nuestros gran pecado, tú, oh Dios nuestro, nos has librado de la pena de nuestra iniquidad, y nos has salvado, como se ve hoy día;


Justo eres tú, oh Señor Dios de Israel; nosotros hemos quedado para que seamos salvados por ti, como se ve este día. Aquí estamos delante de ti con nuestro delito, para que lo perdones; porque no se puede sostener o excusar en tu presencia tal atentado.


Escúchenme tus oídos, y ábranse hacia mí tus ojos, y oye la oración que yo, siervo tuyo, estoy haciendo en tu presencia de noche y de día por los hijos de Israel, tus siervos, confesando los pecados de los hijos de Israel, con que te han ofendido; yo y la casa de mi padre hemos pecado.


Yo que he hablado tan inconsideradamente, ¿qué es lo que puedo ahora responder? Nada. Cerraré mi boca con mi mano.


Por eso yo me acuso a mí mismo, y hago penitencia envuelto en polvo de ceniza.


Porque mis maldades sobrepujan por encima de mi cabeza; y como una carga pesada me tienen agobiado.


Se enconaron y corrompieron mis llagas, a causa de mi necedad.


Y habiendo vuelto al Señor, dijo: Dígnate escucharme, oh Señor: Este pueblo ha cometido un pecado gravísimo; se ha fabricado dioses de oro, Señor, oh perdónales esta culpa,


Como queráis, y me escuchéis, seréis alimentados de los frutos de vuestra tierra.


Y es que nuestras maldades, oh Señor, se han multiplicado en tu presencia, y están atestiguando contra nosotros nuestros pecados; puesto que permanecen en nosotros nuestras iniquidades, y conocemos bien nuestros crímenes.


Por esta causa cesaron las lluvias abundantes, y faltó la lluvia de primavera. Tú, en vez de arrepentirte, presentas el semblante de una mujer prostituta o descarada; no has querido tener rubor ninguno.


Porque estoy viendo ahora que después que tú me convertiste, yo he hecho penitencia; después que me iluminaste, he herido mi muslo; y he quedado confuso y avergonzado, porque he sufrido el oprobio de mi mocedad.


Hemos dado medicinas a Babilonia, y no ha curado, dicen sus amigos; abandonémosla, pues, y volvámonos cada cual a su tierra; pues sus delitos subieron más allá de las nubes, llegaron hasta el cielo.


¿Se han avergonzado acaso por las cosas abominables que han hecho? Antes bien no han tenido ni pizca de confusión, ni sabido siquiera qué cosa es tener vergüenza. Por este motivo caerán entre los que perecen y serán precipitados, dice el Señor, cuando llegue el tiempo de tomarles cuentas.


¿Y están acaso corridos de haber hecho cosas abominables? Ni aun ligeramente han llegado a avergonzarse, ni saben qué cosa es tener vergüenza, por tanto serán envueltos en la ruina de los demás, y precipitados en el tiempo de la venganza, dice el Señor.


Nosotros nos portamos inicuamente, y provocamos, ¡oh Señor!, tu enojo; por eso te muestras inexorable.


a fin de que te acuerdes de tus crímenes, y te confundas, y no te atrevas a abrir la boca de pura vergüenza, cuando yo me hubiere aplacado contigo, después de todas tus fechorías, dice el Señor Dios.


hasta que confiesen sus maldades y las de sus mayores, con que prevaricaron y se rebelaron contra mí.


Le dijo el hijo: Padre mío, yo he pecado contra el cielo y contra ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo.


El publicano, al contrario, puesto allá lejos, ni aun los ojos osaba levantar al cielo; sino que se daba golpes de pecho, diciendo: Dios mío, ten misericordia de mí, que soy un pecador.


Mas ¿y qué frutos sacasteis entonces de aquellos desórdenes de que ahora os avergonzáis? En verdad que la muerte es el fin a que condu-cen.


Porque sus pecados han llegado hasta el cielo, y Dios se ha acordado de sus maldades.


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite