Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt
- Piblisite -





Eclesiastés 2:8 - Biblia Torres Amat 1825

8 Amontoné plata y oro, y los tesoros de los reyes y de las provincias que sujetó mi padre. Escogí para mi palacio cantores o músicos, y cantoras, y cuanto sirve de deleite a los hijos de los hombres; vasos y jarros preciosos para servir el vino en mi mesa.

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

8 Me amontoné también plata y oro, y tesoros preciados de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras, de los deleites de los hijos de los hombres, y de toda clase de instrumentos de música.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

8 Junté grandes cantidades de plata y de oro, el tesoro de muchos reyes y provincias. Contraté cantores estupendos, tanto hombres como mujeres, y tuve muchas concubinas hermosas. ¡Tuve todo lo que un hombre puede desear!

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

8 Amontoné el oro y la plata, todas las riquezas que me venían de los reyes y de las provincias. Tuve cantantes y coristas, y lo que más deleita al hombre: mujeres, muchas mujeres.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

8 Acumulé para mí plata y oro, tesoro digno de reinos y provincias; contraté cantores y cantoras, y tuve un harén de concubinas para gozar como suelen los hombres.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

8 Amontoné plata y oro, tesoros de reyes y provincias. Me procuré cantores y cantoras, todo placer humano y no pocas mujeres.

Gade chapit la Kopi




Eclesiastés 2:8
21 Referans Kwoze  

Ochenta años tengo en el día; ¿acaso tienen vigor mis sentidos para discernir entre lo dulce y lo amargo? ¿O puede deleitar a tu siervo la comida y bebida? ¿O está ya para oír la voz de los cantores y cantoras? ¿A qué fin tu siervo ha de servir de carga al rey, mi señor?


Dio después ella al rey ciento veinte talentos de oro, y grandísima cantidad de aromas y piedras preciosas; nunca jamás en adelante se trajo a Jerusalén tanta cantidad de aromas, como la que regaló la reina de Saba al rey Salomón .


Era la cantidad de oro que cada año percibía Salomón de seiscientos sesenta y seis talentos de oro,


Fuera de esto, todos los vasos en que bebía el rey Salomón eran también de oro; e igualmente toda la vajilla de la casa o palacio del bosque del Líbano era de oro finísimo; no se usaba la plata para dichos vasos, ni casi se hacía aprecio de ella en tiempo del rey Salomón .


tanto, que tuvo setecientas mujeres en calidad de reinas, y trescientas mujeres secundarias; y las mujeres pervirtieron su corazón.


en lugar de los cuales puso Roboam escudos de cobre, entregándolos al cuidado de los capitanes de guardias y de los que hacían centinela a la puerta del palacio del rey.


También había enviado Hiram al rey Salomón ciento veinte talentos de oro;


Y habiendo navegado a Ofir, tomaron de allí cuatrocientos veinte talentos de oro, y se los trajeron al rey Salomón .


Asimismo David y las cabezas o príncipes, de la multitud entresacaron a los hijos de Asaf, y de Hemán, y de Iditún para el ministerio de cantar las alabanzas de Dios al son de las cítaras y salterios, y címbalos, sirviendo en número conveniente en el oficio a que se les había destinado.


Todos los referidos estaban distribuidos bajo la dirección de sus padres, esto es, de Asaf, y de Iditún, y de Hemán, para cantar en el templo del Señor con címbalos, y salterios, y cítaras, en servicio de la casa del Señor cerca del rey.


De cuya madera de tino mandó el rey hacer la gradería del templo del Señor y del palacio real, como también las cítaras y los salterios para los cantores. No se vio nunca en el país de Judá madera como ésta.


sin contar sus esclavos y esclavas, que eran siete mil trescientos treinta y siete; y entre ellos doscientos cantores y cantoras.


Vanidad de vanidades, dijo el Eclesiastés; vanidad de vanidades, y todo lo de acá abajo no es más que vanidad.


Ahora, pues, si estáis dispuestos a obedecer, al punto que oigáis el sonido de la trompeta, de la flauta, del arpa, de la zampoña, y del salterio, y de la sinfonía, y de todo género de instrumentos músicos, postraos, y adorad la estatua que yo he hecho; pero si no la adoráis, al instante seréis arrojados en el horno ardiente de fuego. ¿Y cuál es el dios que os librará de mi mano?


que en el mismo punto en que oyereis el sonido de la trompeta, de la flauta, del arpa, de la zampoña y del salterio, y de la sinfonía, y de toda especie de instrumentos músicos, postrándoos, adoréis la estatua de oro erigida por el rey Nabucodonosor.


Así, pues, luego que los pueblos todos oyeron el sonido de la trompeta, de la flauta, del arpa, de la zampoña, y del salterio, y de la sinfonía, y de toda especie de instrumentos músicos, postrándose todos los pueblos, tribus y lenguas, adoraron la estatua de oro que había levantado el rey Nabucodonosor.


los que cantáis al son del salterio y creéis imitar a David usando instrumentos músicos para vuestro deleite;


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite