Cantares 5:16 - Biblia Torres Amat 1825

¹⁶ A su huerto hubo de bajar mi amado, al plantío de las hierbas aromáticas, para recrearse en los verjeles y coger azucenas.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁶ Su paladar, dulcísimo, y todo él codiciable. Tal es mi amado, tal es mi amigo, Oh doncellas de Jerusalén.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁶ Su boca es la dulzura misma; él es deseable en todo sentido. Así es mi amante, mi amigo, oh mujeres de Jerusalén.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁶ Su hablar es lo más suave que hay y toda su persona es un encanto. Hijas de Jerusalén, así es mi amado, así es mi amigo. KCoro:

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁶ Su paladar es dulcísimo,° Y todo él, la dulzura misma. ¡Tal es mi amado y tal es mi amigo, Oh hijas de Jerusalem!

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁶ Su boca es la dulzura y todo él deseable. Tal es mi amado, así es mi compañero, muchachas de Jerusalén.

Cantares 5:16 Referans Kwoze

2 Samuel 1:23

Saúl y Jonatás, amables y gloriosos durante su vida, más ligeros que las águilas, más fuertes que los leones, han sido inseparables hasta la muerte.

Salmos 119:103

¡Oh cuán dulces son a mi paladar tus palabras!; más que la miel a mi boca.

Salmos 148:13

porque sólo el Nombre del Señor resplandece sobre los cielos y tierra;

Salmos 19:10

Son más codiciables que la abundancia de oro y de piedras preciosas; más dulces que la miel y el panal.

Salmos 45:2

¡Oh tú el más gentil en hermosura entre los hijos de los hombres!, derramada se ve la gracia en tus labios; por eso te bendijo Dios para siempre.

Salmos 89:6

Porque, ¿quién hay en los cielos, que pueda igualarse con el Señor?; ¿quien entre los hijos de Dios es semejante a él?;

Cantares 1:16

de cedro las vigas de nuestras habitaciones, y de ciprés sus artesonados.

Cantares 1:2

fragantes como los más olorosos perfumes. Bálsamo derramado es tu nombre; por eso las doncellitas te quieren tanto.

Cantares 1:5

No reparéis, pues, en que soy morena; porque me ha robado el sol mi color, cuando los hijos de mi madre se declararon contra mí, y me pusieron a guarda de viñas. ¡Ay!, mi propia viña no la guardé.

Cantares 2:1

Como azucena entre espinas, así es mi amiga entre las vírgenes.

Cantares 2:16

hasta que declina el día, y caen las sombras. Vuélvete corriendo, aseméjate, querido mío, a la corza y al cervatillo que se crían en los montes de Beter.

Cantares 2:3

Me introduje en la pieza en que tiene el vino más exquisito, y ordenó en mí el amor.

Cantares 4:3

Tu cuello es recto y airoso, como la torre de David, ceñida de baluartes, de la cual cuelgan mil escudos, arneses todos de valientes.

Cantares 6:3

Aparta de mí tus ojos, pues éstos me han hecho salir fuera de mí, y me arroban. Son tus cabellos como el fino pelo de los rebaños de cabras que se dejan ver viniendo de Galaad.

Cantares 7:9

¡Ea!, ven querido esposo mío, salgamos al campo, moremos en las granjas.

Jeremías 15:16

Yo hallé tu divina palabra, y me alimenté con ella; y en tu palabra hallé el gozo mío y la alegría de mi corazón; porque yo llevo el nombre de profeta tuyo, ¡oh Señor Dios de los ejércitos!

Jeremías 3:20

Pero como una mujer que desprecia al que la ama, así me ha desdeñado a mí la familia de Israel, dice el Señor.

Oseas 3:1

Me dijo el Señor: Ve aún, y ama a una mujer que ha sido amada de su amigo y adúltera: así como el Señor ama a los hijos de Israel, y ellos vuelven sus ojos hacia los dioses ajenos, y aman el hollejo de las uvas.

Gálatas 2:20

y yo vivo ahora, o más bien no soy yo el que vivo, sino que Cristo vive en mí. Así la vida que vivo ahora en esta carne, la vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó, y se entregó a sí mismo a la muerte por mí.

Filipenses 3:8

Y en verdad, todo lo tengo por pérdida o desventaja, en cotejo del sublime conocimiento de mi Señor Jesucristo, por cuyo amor he abandonado y perdido todas las cosas, y las miro como basura, por ganar a Cristo ,

Santiago 2:23

¿No véis cómo el hombre se justifica por las obras, y no por la fe solamente?

Santiago 4:4

¿Pensáis acaso que sin motivo dice la Escritura: El Espíritu de Dios que habita en vosotros, os ama y codicia con celos?