Biblia Todo Logo
Bib sou entènèt

- Piblisite -





2 Corintios 4:5 - Biblia Torres Amat 1825

5 Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo, Señor nuestro, haciéndonos siervos vuestros por amor de Jesús .

Gade chapit la Kopi


Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

5 Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos por amor de Jesús.

Gade chapit la Kopi

Biblia Nueva Traducción Viviente

5 Como ven, no andamos predicando acerca de nosotros mismos. Predicamos que Jesucristo es Señor, y nosotros somos siervos de ustedes por causa de Jesús.

Gade chapit la Kopi

Biblia Católica (Latinoamericana)

5 No nos pregonamos a nosotros mismos, sino que proclamamos a Cristo Jesús como Señor; y nosotros somos servidores de ustedes por Jesús.

Gade chapit la Kopi

La Biblia Textual 3a Edicion

5 Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesús el Mesías como Señor, y a nosotros mismos como siervos vuestros por causa de Jesús.

Gade chapit la Kopi

Biblia Serafín de Ausejo 1975

5 Pues no nos proclamamos a nosotros mismos, sino a Cristo Jesús Señor, y a nosotros como a servidores vuestros por amor a Jesús.

Gade chapit la Kopi




2 Corintios 4:5
39 Referans Kwoze  

Vosotros, por el contrario, no habéis de querer ser saludados maestros, porque uno solo es vuestro Maestro, y todos vosotros sois hermanos.


Yo a la verdad os bautizo con agua para moveros a la penitencia; pero el que ha de venir después de mí es más poderoso que yo, y no soy yo digno siquiera de llevarle las sandalias; él es quien ha de bautizaros en el Espíritu Santo y en el fuego.


Quien habla de su propio movimiento, busca su propia gloria; mas el que únicamente busca la gloria del que le envió, ése es veraz, y no hay en él injusticia o fraude.


Lo cual ha hecho entender Dios a los hijos de Israel, anunciándoles la paz por Jesucristo (el cual es el Señor de todos).


Persuádase, pues, toda la casa de Israel, que Dios ha constituido Señor, y Cristo , a este mismo Jesús , al cual vosotros habéis crucificado.


A éste ensalzó Dios con su diestra por príncipe y salvador , para dar a Israel el arrepentimiento y la remisión de los pecados:


mas nosotros predicamos sencillamente a Cristo crucificado, lo cual para los judíos es motivo de escándalo, y parece una locura a los gentiles;


al modo que yo también en todo procuro complacer a todos, no buscando mi utilidad particular, sino la de los demás, a fin de que se salven.


Ahora, pues, yo os declaro que ningún verdadero profeta, ningún hombre que habla inspirado de Dios, dice anatema a Jesús . Ni nadie puede confesar que Jesús es el Señor, sino por el Espíritu Santo.


El primer hombre es el terreno, formado de la tierra; y el segundo hombre es el celestial, que viene del cielo.


puesto que no me he preciado de saber otra cosa entre vosotros, sino a Jesucristo, y éste crucificado.


Porque aun cuando tengáis millares de maestros en Jesucristo, no tenéis muchos padres. Pues yo soy el que os he engendrado en Jesucristo por medio de la buena nueva.


sin embargo, para nosotros no hay más que un solo Dios, que es el Padre, del cual tienen el ser todas las cosas, y que nos ha hecho a nosotros para él; y no hay sino un solo Señor, que es Jesucristo, por quien han sido hechas todas las cosas, y somos nosotros por él cuanto somos.


Porque Jesucristo, Hijo de Dios que os hemos predicado nosotros, esto es, yo, y Silvano, y Timoteo, no es tal que se hallen en él, el sí y el no, sino que en él todo es inmutable, un sí invariable.


no es esto porque dominemos en vuestra fe; al contrario procuramos contribuir a vuestro gozo, puesto que permanecéis firmes en la fe que recibisteis.


Porque vosotros, hermanos míos, sois llamados a un estado de libertad; cuidad solamente que esta libertad no os sirva de ocasión para vivir según la carne; pero sed siervos unos de otros por un amor espiritual,


Verdad es que hay algunos que predican a Cristo por espíritu de envidia y como por tema, mientras otros lo hacen con buena intención.


y toda lengua confiese que el Señor Jesucristo está en la gloria de Dios Padre.


Es una verdad incontrastable que si morimos con él, también con él viviremos;


Dijo uno de ellos, propio profeta, de esos mismos isleños: Son los cretenses siempre mentirosos, malignas bestias, vientres perezosos.


Porque si Dios no perdonó a los ángeles delincuentes, sino que amarrados con cadenas infernales los precipitó al tenebroso abismo, en donde son atormentados y tenidos como en reserva hasta el día del juicio;


Swiv nou:

Piblisite


Piblisite