1 Reyes 18:18 - Biblia Torres Amat 1825

¹⁸ A lo que respondió Elías: No he alborotado yo a Israel; sino tú y la casa de tu padre, que habéis despreciado los mandamientos del Señor, y seguido a los Baales o falsos dioses.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁸ Y él respondió: Yo no he turbado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, dejando los mandamientos de Jehová, y siguiendo a los baales.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁸ —Yo no le he causado ningún problema a Israel —respondió Elías—. Tú y tu familia son los alborotadores, porque se negaron a obedecer los mandatos del Señor y, en cambio, han rendido culto a las imágenes de Baal.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁸ Elías le respondió: 'No soy yo el causante de la desgracia de Israel, sino tú y la casa de tu padre, porque han abandonado los mandamientos de Yavé y se han vuelto a los Baales.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁸ Y él respondió: No he perturbado yo a Israel, sino tú y la casa de tu padre, que abandonaron los mandamientos de YHVH para seguir a los baales.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁸ Él le respondió: 'No soy yo el que trae calamidades a Israel, sino tú y la casa de tu padre, porque habéis abandonado los mandamientos de Yahveh, y os habéis ido tras de los baales.

1 Reyes 18:18 Referans Kwoze

1 Reyes 16:31

Pues no se contentó con imitar los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, sino que además tomó por mujer a Jezabel, hija de Etbaal, rey de los sidonios, por donde vino a servir a Baal y adorarlo.

1 Reyes 16:32

Y erigió un altar a Baal en el templo que le había edificado en Samaria,

1 Reyes 21:25

Lo cierto es que no hubo jamás otro tal como Acab; el cual se prostituyó o se vendió para obrar lo malo delante del Señor; porque lo instigó su mujer Jezabel,

1 Reyes 21:26

y se hizo abominable en tanto grado, que se iba tras los ídolos fabricados por los amorreos, a los cuales había el Señor destruido al llegar los hijos de Israel.

1 Reyes 9:9

Y le responderán: Porque abandonaron al Señor Dios suyo, que sacó a sus padres de la tierra de Egipto, y se fueron tras los dioses ajenos, y los adoraron y dieron culto; por eso el Señor ha descargado sobre ellos todos estos males.

2 Crónicas 15:2

fue a encontrar a Asá, y le dijo: Escuchadme tú, oh Asá, y pueblos todos de Judá y de Benjamín: El Señor ha estado con vosotros en la batalla, porque vosotros habéis permanecido adictos a él. Si vosotros lo buscareis, lo hallaréis; mas si lo abandonareis, os abandonará.

2 Crónicas 28:19

Porque el Señor había humillado a Judá por los pecados de Acaz, rey de Judá, a quien dejó sin amparo por su desprecio del Señor.

Proverbios 11:19

La clemencia es camino para la vida; y la afición al mal conduce a la muerte.

Proverbios 13:21

El mal persigue a los pecadores; pero los justos serán recompensados con bienes.

Proverbios 28:4

Los que abandonan la ley de Dios, alaban al impío; pero los que la guardan se enardecen contra él.

Proverbios 5:22

El impío será presa de sus mismas iniquidades, y quedará enredado en los lazos de su pecado.

Isaías 3:11

Mi pueblo ha sido despojado por sus regidores, y es gobernado por mujeres. Pueblo mío, los que te llaman bienaventurado, ésos son los que te traen engañado, y destruyen el camino que tú debes seguir.

Jeremías 2:13

Porque dos maldades ha cometido mi pueblo: Me han abandonado a mí, que soy fuente de agua viva, y han ido a fabricarse aljibes, aljibes rotos, que no pueden retener las aguas.

Jeremías 2:19

Tu malicia, ¡oh pueblo ingrato!, te condenará, y gritará contra ti tu apostasía. Reconoce, pues, y advierte ahora cuán mala y amarga cosa es haber tú abandonado el Señor Dios tuyo, y no haberme temido a mí, dice el Señor Dios de los ejércitos.

Jeremías 23:13

Así como en los profetas de Samaria vi la insensatez que profetizaban en nombre de Baal, y embaucaban a mi pueblo de Israel,

Jeremías 38:4

Entonces dijeron los príncipes al rey: Te pedimos que sea condenado a muerte ese hombre; porque él procura de intento que desmayen los brazos de los valientes, y el esfuerzo de los guerreros que han quedado en esta ciudad, y de todo el pueblo, con aquellas palabras que dice. Pues está visto que ese hombre no procura el bien sino el mal de este pueblo.

Ezequiel 3:8

He aquí que yo te daré a ti un rostro más firme que el rostro de ellos y una frente más dura que la frente suya.

Mateo 14:4

Porque Juan le decía: No te es lícito tenerla por mujer.

Hechos 24:13

o en la ciudad; ni pueden alegarte prueba de cuantas cosas me acusan ahora.

Hechos 24:20

Pero ahora digan estos mismos que me acusan, si, congregados en el sanedrín, han hallado en mí algún delito,

Deuteronomio 31:16

Y dijo el Señor a Moisés: He aquí que tú vas a descansar con tus padres; y ese pueblo se rebelará y prostituirá a dioses ajenos en la tierra en que va a entrar para morar en ella: allí me abandonará, y quebrantará el pacto que tengo con él concertado;

1 Samuel 14:29

A lo que respondió Jonatás: Mi padre lo ha echado a perder todo con ese juramento. Vosotros mismos habéis visto cómo mis ojos han recobrado un nuevo vigor por haber gustado un poquito de esa miel.