Cuando hubieron terminado, presentaron ante el rey y Joiada el resto de la plata, e hicieron con ella utensilios para la Casa de YHVH: objetos para el servicio y para los holocaustos, cucharas y otros objetos de oro y de plata. Y todos los días de Joiada se ofrecieron holocaustos, continuamente en la Casa de YHVH.
Entonces el rey llamó al sumo sacerdote Joiada, y le dijo: ¿Por qué no requeriste de los levitas que trajeran de Judá y de Jerusalem el tributo de Moisés, siervo de YHVH, y de la asamblea de Israel, para la Tienda de Reunión?°
Que me buscan de día en día, Y muestran deseos de conocer mis caminos, Como un pueblo que practicara la justicia, Y que no abandonara la Ley de su Dios. Me piden las ordenanzas de justicia, Se complacen en la cercanía de ’Elohim.
De todo el que oye la palabra del reino y no la entiende, viene el maligno y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Éste es el que fue sembrado junto al camino.
porque Herodes, sabiendo que era un varón justo y santo, temía a Juan y lo protegía, y cuando lo oía, se quedaba muy perplejo;° pero con todo, le gustaba oírlo.
y aun Simón mismo creyó, y habiendo sido bautizado, estaba apegado constantemente a Felipe; y se maravillaba al ver las señales milagrosas° y los grandes portentos que se hacían.°