Daniel 4:20 - La Biblia Textual 3a Edicion

²⁰ El árbol que has visto, que crecía y se hacía fuerte, y cuya copa llegaba a los cielos, y se extendía a todos los confines de la tierra,

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁰ El árbol que viste, que crecía y se hacía fuerte, y cuya copa llegaba hasta el cielo, y que se veía desde todos los confines de la tierra,

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁰ El árbol que usted vio crecía alto y se hacía fuerte y se elevaba hacia los cielos para que todo el mundo lo viera.

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁰ Pero viste, oh rey, que bajaba del cielo un ángel, un Santo, y decía: Corten el árbol, destrúyanlo, pero dejen en la tierra el tronco y las raíces atadas con cadenas de hierro y de bronce en medio de la hierba del campo, que sea mojado por el rocío del cielo y que comparta su alimento con los animales salvajes hasta que pasen siete años sobre él.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁰ 'En cuanto a lo que vio el rey: a un vigilante, a un santo, que bajaba del cielo y decía: abatid el árbol y destruidlo, pero dejad en la tierra el tocón y sus raíces, atado con cadenas de hierro y de bronce, entre la hierba de los campos; que se empape del rocío del cielo y que comparta su vida con las bestias del campo, hasta que pasen sobre él siete tiempos',

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

²⁰ El árbol que viste, que crecía y se hacía fuerte, y que su altura llegaba hasta el cielo, y que era visible a toda la tierra;

Daniel 4:20 Referans Kwoze

Ezequiel 31:16

Al estruendo de su caída hice temblar a las naciones, cuando lo hice descender al Seol con todos los que bajan a la sepultura. Entonces todos los árboles escogidos del Edén y los mejores del Líbano, todos los que beben aguas, fueron consolados en lo profundo de la tierra.

Ezequiel 31:3

He aquí el cedro del Líbano,° De hermosas ramas, frondoso ramaje y elevada altura, Cuya copa se destaca entre las nubes.

Daniel 4:21

cuyo follaje era hermoso y su fruto abundante, en que había alimento para todos, debajo del cual moraban las bestias del campo, y en cuyas ramas anidaban las aves de los cielos,