1 Corintios 3:16 - La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁶ ¿No sabéis que sois santuario de Dios, y el Espíritu de Dios mora en vosotros?°

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

¹⁶ ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁶ ¿No se dan cuenta de que todos ustedes juntos son el templo de Dios y que el Espíritu de Dios vive en ustedes?

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁶ ¿No saben que son templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en ustedes?

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁶ ¿No sabéis que sois templo de Dios y que el Espíritu de Dios habita en vosotros?

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

¹⁶ ¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros?

1 Corintios 3:16 Referans Kwoze

Ezequiel 36:27

Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra.

Juan 14:17

El Espíritu de la Verdad, al cual el mundo no puede recibir, pues no lo ve ni lo conoce. Vosotros lo conocéis, porque mora con vosotros y estará en vosotros.°

Romanos 6:16

¿Acaso no sabéis que a quien os presentáis como siervos para obedecerle, siervos sois de aquel a quien obedecéis, ya sea del pecado para muerte, o de la obediencia para justicia?

Romanos 6:3

¿No sabéis que todos los que fuimos bautizados en Jesús el Mesías, fuimos bautizados en su muerte?

Romanos 8:11

Y si el Espíritu del que levantó de los muertos a Jesús vive en vosotros, el que levantó al Mesías° de los muertos vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que vive en vosotros.

Romanos 8:9

Pero vosotros no estáis en la carne, sino en el espíritu, por cuanto° el Espíritu de Dios vive en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu del Mesías, éste no es de Él.

1 Corintios 3:17

Si alguno destruye el santuario de Dios, Dios lo destruirá a él, porque el santuario de Dios es santo, el cual sois vosotros.

1 Corintios 3:9

Porque somos colaboradores de Dios;° y vosotros sois labranza de Dios, edificio de Dios.

1 Corintios 5:6

No es buena vuestra jactancia, ¿no sabéis que un poco de levadura leuda toda la masa?°

1 Corintios 6:16

¿O no sabéis que el que se une con la ramera, es un solo cuerpo con ella?° Porque dice: los dos serán una sola carne.°

1 Corintios 6:19

¿No sabéis que vuestro cuerpo es santuario del Espíritu Santo que está en vosotros,° el cual tenéis de Dios,° y que no sois vuestros?

1 Corintios 6:9

¿O no sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales,

1 Corintios 9:13

¿No sabéis que los que trabajan en las cosas sagradas, comen del santuario, y los que sirven al altar, participan del altar?°

1 Corintios 9:24

¿No sabéis que los que corren en el estadio, todos a la verdad corren, pero uno solo recibe el premio? ¡Corred de tal forma que lo obtengáis!

2 Corintios 6:16

¿Y qué acuerdo entre el santuario de Dios y el de los ídolos? Porque nosotros somos° santuario del Dios viviente,° como dijo Dios: Habitaré entre ellos y entre ellos andaré; Y seré su Dios, y ellos serán mi pueblo.°

1 Timoteo 3:15

pero, si me retraso, para que sepas cómo hay que comportarse en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y baluarte° de la verdad.

2 Timoteo 1:14

Guarda el buen depósito por medio del Espíritu Santo que vive en nosotros.

Hebreos 3:6

pero el Mesías, como Hijo sobre su Casa, la cual casa somos nosotros, si nos aferramos a la confianza y a gloriarnos en la esperanza.°

Santiago 4:4

¡Adúlteras!° ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad para con Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye en enemigo de Dios.

1 Pedro 2:5

Vosotros también, como piedras vivas, estáis siendo° edificados como casa espiritual para un sacerdocio santo, a fin de° ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesús el Mesías.

1 Juan 4:12

A Dios nadie jamás lo vio;° si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor ha sido perfeccionado en nosotros.