2 'Manda a los israelitas que, de la heredad que les pertenece, cedan a los levitas algunas ciudades en las que puedan habitar. Les daréis también tierras de pasto alrededor de las mismas.
2 Manda a los hijos de Israel que den a los levitas, de la posesión de su heredad, ciudades en que habiten; también daréis a los levitas los ejidos de esas ciudades alrededor de ellas.
2 «Ordena a los israelitas que, de las propiedades que recibieron, entreguen a los levitas algunas ciudades donde vivir, junto con los pastizales que las rodean.
2 Manda a los hijos de Israel que cedan a los levitas, algunas ciudades de la herencia que les pertenece, con lugares de pastoreo alrededor, para que puedan habitarlas.
2 Ordena a los hijos de Israel que de su herencia en propiedad, den a los levitas ciudades en que puedan habitar, y entregaréis también a los levitas los pastizales de las ciudades en torno a ellas.
2 Manda a los hijos de Israel, que den a los levitas de la posesión de su heredad ciudades en que habiten: También daréis a los levitas ejidos de esas ciudades alrededor de ellas.
y dijo luego a toda la asamblea de Israel: 'Si os parece bien, y que es voluntad de Yahveh, nuestro Dios, vamos a mandar aviso a todos nuestros hermanos que han quedado en todos los territorios de Israel, y también a los sacerdotes y levitas que están en sus ciudades y ejidos, para que se reúnan con nosotros,
Los levitas abandonaron sus ejidos y sus posesiones y se fueron a Judá y a Jerusalén, porque Jeroboán con sus hijos los había excluido del sacerdocio de Yahveh
En cuanto a los hijos de Aarón, los sacerdotes que vivían en los campos, en los ejidos de sus ciudades, había en cada ciudad hombres nominalmente designados para distribuir las porciones a todos los varones de la clase sacerdotal, y a todos los que habían sido inscritos entre los levitas.
Supe también que no se les habían entregado a los levitas las porciones debidas y que, por tanto, los levitas y cantores encargados del servicio se habían desbandado cada uno a su campo.
También estará en medio de lo que pertenece al príncipe la propiedad de los levitas y la propiedad de la ciudad. Las posesiones del príncipe estarán entre el territorio de Judá y el territorio de Benjamín.'
'Junto al territorio de Judá, desde el lado oriental hasta el lado occidental, estará la parte sagrada, que habéis de reservar, de veinticinco mil codos de anchura y una longitud igual a la de las demás partes, desde el lado oriental hasta el lado occidental. En medio de ella estará el santuario.
Si un levita llega de una de tus ciudades o de cualquier sitio de Israel, donde habitualmente mora, y siente el vivo deseo de entrar en el lugar que habrá escogido Yahveh,