Isaías 10:4 - Nueva Biblia Española (1975)

⁴ para no ir encorvados con los prisioneros y no caer con los asesinados? Y, con todo, no se aplaca su ira, sigue extendida su mano.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

⁴ Sin mí se inclinarán entre los presos, y entre los muertos caerán. Ni con todo esto ha cesado su furor, sino que todavía su mano está extendida.

Biblia Nueva Traducción Viviente

⁴ Irán tropezando como prisioneros o quedarán tendidos entre los muertos. Pero aun así no quedará satisfecho el enojo del Señor; su puño sigue preparado para dar el golpe.

Biblia Católica (Latinoamericana)

⁴ No quedará más que doblegarse bajo las cadenas o caer con los muertos. Pero a Yavé no se le ha pasado el enojo, aún sigue con la mano amenazante.

La Biblia Textual 3a Edicion

⁴ Para no marchar encorvados con los cautivos, Para no caer entre los asesinados? Y con todo, no se aplaca su ira: Su mano sigue extendida.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

⁴ ¡Sólo queda doblarse entre los prisioneros y caer entre los degollados! Y ni aun así se calmó su ira, su mano está todavía extendida.

Isaías 10:4 Referans Kwoze

Isaías 22:2

llena de ruido, urbe estridente, ciudad divertida. Tus caídos no han caído a espada, no han muerto en combate;

Isaías 24:22

Se van agrupando y quedan encerrados, presos en la mazmorra; pasados muchos días comparecerán ajuicio.

Isaías 34:3

Sus muertos son arrojados y de los cadáveres se levanta el hedor, los montes chorrean sangre y los valles se resquebrajan,

Isaías 5:25

Por eso se inflama la ira del Señor contra su pueblo y extiende la mano para herirlo. Tiemblan los montes, yacen los cadáveres como estiércol por las calles. Y con todo eso no se aplaca su ira, sigue extendida su mano.

Isaías 66:16

Porque el Señor va a juzgar con su fuego y con su espada a todo mortal: serán muchas las víctimas del Señor.

Isaías 9:11

por delante Damasco, por la espalda los filisteos devorarán a Israel a boca llena. Y con todo, no se aplaca su ira, sigue extendida su mano.

Isaías 9:12

Pero el pueblo no se ha vuelto al que lo hería, no ha buscado al Señor de los ejércitos.

Isaías 9:16

Por eso el Señor no perdona a los jóvenes, no se compadece de huérfanos y viudas; porque todos son impíos y malvados y toda boca profiere infamias. Y, con todo, no se aplaca su ira, sigue extendida su mano.

Isaías 9:17

Sí, la maldad está ardiendo como fuego que consume zarzas y cardos, prende en la espesura del bosque, y se enrosca la altura del humo.

Isaías 9:20

Manases contra Efraín, Efraín contra Manases, juntos los dos contra Judá.

Isaías 9:21

Y, con todo, no se aplaca su ira, sigue extendida su mano.

Jeremías 15:2

Y si te preguntan adonde han de salir, diles: Así dice el Señor: El destinado a la muerte, a la muerte; el destinado a la espada, a la espada; el destinado al hambre, al hambre; el destinado al destierro, al destierro.

Jeremías 37:10

Aunque derrotaran al ejército caldeo que los ataca, de manera que no quedaran más que soldados heridos, se levantaría cada uno en su tienda y prendería fuego a esta ciudad.

Jeremías 4:8

Por eso vístanse de sayal, hagan duelo y giman, porque no cede el incendio de la ira del Señor.

Oseas 9:12

aunque críen a sus hijos, los dejaré sin descendencia, pues ¡ay de ellos! cuando de ellos me aparte.

Levítico 26:17

me enfrentaré con ustedes y sucumbirán ante sus enemigos; sus contrarios los someterán y huirán sin que nadie los persiga.

Deuteronomio 32:30

¿Cómo es que uno persigue a mil y dos ponen en fuga a diez mil? ¿No es porque su Roca los ha vendido, porque el Señor los ha entregado?