2 Reyes 4:27 - Nueva Biblia Española (1975)

²⁷ Pero al llegar junto al profeta, en lo alto del monte, se abrazó a sus pies. Guejazí se acercó para apartarla, pero el profeta le dijo: Déjala, que está apenada, y el Señor me lo tenía oculto sin revelármelo.

Plis vèsyon

Biblia Reina Valera 1960

²⁷ Luego que llegó a donde estaba el varón de Dios en el monte, se asió de sus pies. Y se acercó Giezi para quitarla; pero el varón de Dios le dijo: Déjala, porque su alma está en amargura, y Jehová me ha encubierto el motivo, y no me lo ha revelado.

Biblia Nueva Traducción Viviente

²⁷ Sin embargo, cuando ella se encontró con el hombre de Dios en la montaña, se postró en el suelo delante de él y se agarró de sus pies. Giezi comenzó a apartarla, pero el hombre de Dios dijo: «Déjala. Está muy angustiada, pero el Señor no me ha dicho qué le pasa».

Biblia Católica (Latinoamericana)

²⁷ Pero en cuanto llegó donde el hombre de Dios que estaba en el monte, le abrazó las piernas. Guejazí se acercó para separarla, pero el hombre de Dios le dijo: '¡Déjala! Su corazón está repleto de tristeza, Yavé me lo ha ocultado y no me lo ha dado a conocer'.

La Biblia Textual 3a Edicion

²⁷ Pero al llegar al monte ante el varón de Dios, ella se aferró a sus pies. Y Giezi se acercó para apartarla, pero el varón de Dios dijo: Déjala, porque su alma está en amargura, y YHVH me lo ha ocultado, y no me lo ha declarado.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

²⁷ Pero apenas llegó ante el varón de Dios, en el monte, se abrazó a sus pies. Guejazí se acercó para apartarla, pero el varón de Dios le dijo: 'Déjala, porque su alma está llena de amargura, pero Yahveh me lo ha ocultado y no me lo ha manifestado'.

2 Reyes 4:27 Referans Kwoze

Génesis 18:17

El Señor pensó: ¿Puedo ocultarle a Abrahán lo que pienso hacer?

2 Samuel 7:3

Natán le respondió: Anda, haz lo que tienes pensado, que el Señor está contigo.

2 Reyes 4:25

Marchó, pues, y llegó a donde estaba el profeta, en el monte Carmelo. Cuando Eliseo la vio venir, dijo a su sirviente Guejazí: AHÍ viene la sunamita.

2 Reyes 4:26

Corre a su encuentro y pregúntale qué tal están ella, su marido y el niño. Ella respondió: Estamos bien.

2 Reyes 6:12

Uno de los ministros respondió: No es eso, majestad. Eliseo, el profeta de Israel, es quien comunica a su rey las palabras que pronuncias en tu alcoba.

Job 10:1

Estoy hastiado de la vida: me voy a entregar a las quejas, desahogando la amargura de mi alma.

Proverbios 14:10

Conoce el corazón su propia amargura y en su gozo no se mezcla el extraño.

Proverbios 18:14

Buen ánimo sostiene en la enfermedad; ánimo abatido, ¿quién lo levantará?

Amós 3:7

No hará cosa el Señor sin revelar su plan a sus siervos los profetas.

Mateo 15:23

El no le contestó palabra. Entonces los discípulos se le acercaron a rogarle: Atiéndela, que viene detrás gritando.

Mateo 20:31

La gente les regañaba para que se callaran, pero ellos gritaban más: ¡Ten compasión de nosotros, Señor, Hijo de David!

Mateo 28:9

De pronto Jesús 'es salió al encuentro y las saludó diciendo: ¡Alégrense! Ellas se acercaron y se postraron, abrazándole los pies.

Marcos 10:13

Le acercaban niños para que los tocara, pero los discípulos les regañaban.

Marcos 14:6

y habérselo dado a los pobres. Y le reñían, 'pero Jesús replicó: Déjenla, ¿por qué la molestan? Está muy bien lo que ha hecho conmigo.

Lucas 7:38

se colocó detrás de él junto a sus pies, llorando, y empezó a regarle los pies con sus lágrimas; se los secaba con el pelo, los cubría de besos y se los ungía con el perfume.

Juan 15:15

No, no les llamo siervos, porque un siervo no está al corriente de lo que hace su señor; a ustedes les vengo llamando amigos, porque todo lo que le oí a mi Padre se lo he comunicado.

Juan 4:27

En aquel momento llegaron sus discípulos y se quedaron extrañados de que hablase con una mujer, aunque ninguno le preguntó de qué discutía o por qué hablaba con ella.

1 Samuel 1:10

Ana se levantó, y con el alma llena de amargura se puso a rezar al Señor, llorando a todo llorar.